|
Foto: Stefano Zamagni |
> Colaborador de Juan Pablo II y Benedicto XVI, es profesor de Economía Política en la Universidad de Bolonia y en la Johns Hopkins, en Baltimore
> Es uno de los principales redactores de la encíclica 'Caritas in veritate' y dice que ‘La gente no sabe que los primeros bancos los crearon los franciscanos’
> La encíclica ‘Rerum Novarum’ del papa León XIII es compañera de viaje de Marx por su crítica común al capitalismo salvaje
"Los creadores de la economía de mercado fueron los
franciscanos. ¡Sí, los franciscanos! Pero la gente no lo sabe. Fundaron los
primeros bancos porque tenían que resolver problemas". Stefano Zamagni no
demoniza ni santifica el capitalismo: acepta que existe porque la gente lo
necesita, y sobre ese presupuesto propone que, más que ir contra el libre
mercado, hay que jugar dentro de él, pero marcándose objetivos que
beneficien
el interés general. Zamagni es consultor de economía (no retribuido, aclara)
del papa Francisco, como lo fue de sus predecesores Juan Pablo II y Benedicto
XVI, así como del ex primer ministro italiano Romano Prodi.
Profesor de Economía Política en la Universidad de Bolonia y
en la estadounidense Johns Hopkins, en Baltimore, Zamagni ha venido la semana
pasada a la Universidad Loyola, que los jesuitas han abierto este curso en el
campus de Palmas Altas de Sevilla, para defender en el Simposio Unijes de
Pensamiento Social Cristiano, titulado Propuestas en tiempos de crisis, su
visión de la "economía civil" como alternativa al neoliberalismo a
ultranza o "turbocapitalismo" que dice que ha llevado a la crisis
actual. Zamagni cuenta en […] que está
"ansioso" por conocer los cambios que imprime Francisco a la iglesia
católica en el plano económico, para lo que él, como consultor, está convocado
en enero en el Vaticano a una reunión del Consejo Pontificio Justicia y Paz,
pero dice que el nuevo papa necesita tiempo aún porque ahora está concentrado
en dos objetivos más urgentes: "la
reforma interna de la Curia y de la Santa Sede y restablecer la comunicación
directa con los católicos, dos objetivos que está cumpliendo con gran
eficacia".
Apunta que aunque aún Francisco no ha mostrado su postura
económica, ya ha dado un giro copernicano en el terreno de la transparencia al
publicar por primera vez, el pasado 1 de octubre, las cuentas anuales del
Instituto para las Obras de la Religión (IOR), más conocido por su nombre
popular de Banco Vaticano, que ganó 86,6 millones de euros en 2012, cuatro
veces más que en 2011.
Zamagni dice que el punto de inflexión lo marcó Benedicto
XVI con la encíclica de doctrina social de la Iglesia Caritas in veritate, de
2009, de la que el profesor fue uno de los principales redactores. "Antes
de ella, la doctrina social de la iglesia era de defensa" ante los abusos
del capitalismo, "y ahora ha pasado al rol de delantero, con propuestas
positivas" que en vez de negar el mercado intentan mejorarlo y hacerlo más
justo, dice usando el símil futbolístico.
Las tres variantes
del libre mercado
Explica que el libre mercado tiene tres variantes: el
neoliberalismo, que la crisis prueba que "ha fallado"; la economía
social de mercado alemana, cuya peculiaridad cultural dice que no la hace
exportable, y la economía civil, "que tiene sus raíces en Italia con el
humanismo y en España con la Escuela de Salamanca" y que está en expansión
mundial, incluidos los países anglosajones, donde "han visto que el
neoliberalismo puede destruir el sistema".
Que su libro sobre el tema haya sido traducido a siete
idiomas es para él una muestra del interés creciente por humanizar el
capitalismo. La economía civil o economía social, dice, no trata de ir contra
el capitalismo como los marxistas, sino de reformarlo. "La historia enseña
que las revoluciones sirven para destruir, pero no para construir. La línea del
reformismo requiere más tiempo, pero es más segura".
Ve grandes avances en la penetración de la ética en los
negocios. "Hace treinta años no se hablaba de responsabilidad social de
las empresas. Las finanzas éticas son hoy el 15% del total de las
transacciones. Están las inversiones socialmente responsables, las
cooperativas, las credit unions
[cooperativas financieras], el comercio eco-solidario, que se encuentra en todas
las cadenas de distribución. El cash-mob [concertar compras colectivas en
pequeños comercios para salvarlos] se creó hace dos años en Estados Unidos.
Allí los consumidores ejercen el vote with
your wallet [votar con tu monedero al comprar]. Las grandes empresas les
tienen miedo porque pueden boicotearlas y es el fin para ellas. Fíjate en el
caso de la Coca-Cola, que va abajo por los ataques de consumidores...".
¿Y el peligro de que la responsabilidad social corporativa
no sea más que una careta o maquillaje o recurso de marketing de las empresas
para vender más? El economista dice que hay compañías que hacen eso
"trucando las cartas" para maximizar sus beneficios en el corto
plazo, pero que "más tarde o más temprano la verdad se sabe" por las
denuncias de los consumidores, y menciona los casos de Apple, Nestlé o Reebok.
'El capital' y la
encíclica 'Rerum Novarum'
Al papa Francisco lo conocía ya de cuando Jorge Mario
Bergoglio era cardenal de Buenos Aires, ciudad donde el economista también
enseña desde hace 15 años porque la Universidad de Bolonia tiene allí otra
sede. Del papa dice que es un hombre que, "como jesuita, sabe y es
abierto", y que ahora "está pensando, recogiendo material" para
reformar la iglesia. Zamagni menciona que el Banco Vaticano se equivocó por
dedicarse a la especulación. "Dinero hace falta, porque hay que financiar
a las iglesias de África y Asia; el error ha sido la manera de hacerlo, con la
especulación, y no se debe especular, y menos sin transparencia". Dice que
la apuesta del papa Francisco por sanear el Banco Vaticano y publicar sus
cuentas "demuestra que se puede conseguir dinero sin infringir las reglas
y con transparencia, y anima a la gente a donar dinero a la iglesia".
La crisis capitalista "le
ha dado la razón a Marx" por su análisis de la explotación del
trabajo. "Marx hace un diagnóstico correcto; su error es la terapia".
Zamagni afirma que no se le ha leído bien. "Él decía que no se debe hacer
la revolución. Como método, era reformista. Pero Lenin le impuso una aceleración
a la teoría marxista para hacer la revolución. Lenin traicionó a Marx, y la
gente no lo sabe". Otro aspecto desconocido, añade divertido este hombre
alto y corpulento, es que la encíclica Rerum Novarum (De las cosas nuevas,
1891) del papa León XIII es compañera de viaje de Marx por su crítica común al
capitalismo salvaje. "Tú lees Rerum Novarum y lees El capital, quitándoles
el título, y no sabes distinguir quién es uno y quién es otro". Bueno, sí,
hay una diferencia, añade. "El Rerum Novarum es mucho más fuerte que El
capital, porque dice que la explotación es un pecado contra Dios, que es más
fuerte que decir que es una violación de un derecho humano".