- “… el proletariado no se puede limitar a gestionar el aparato del estado burgués; tiene que destruirlo y sustituirlo por un nuevo Estado.”
Álvaro Cunhal ✆ Domingos Pinho |
Al final del siglo XIX, el socialdemócrata alemán Edward Bernstein sustentó que era posible derrotar a la burguesía y transformar radicalmente la sociedad en un marco institucional (el bismarkiano) sin necesidad de una revolución. Para Bernstein “el movimiento (léase reformas) es casi todo”. Esa posición, denunciada como oportunista y capituladora por Rosa Luxemburgo y Lenin, señaló el inicio de una ruptura con el marxismo de partidos y organizaciones que hasta ese momento defendían la toma del poder por la clase obrera por la vía revolucionaria. La destrucción del capitalismo en Rusia tras la Revolución de Octubre, concebida y dirigida por el Partido Bolchevique, no puso fin a la polémica en torno de una cuestión central: ¿es posible construir el socialismo en un país utilizando las instituciones creadas por la burguesía para lograr sus objetivos?