"No hay porvenir sin Marx. Sin la memoria y sin la herencia de Marx: en todo caso de un cierto Marx: de su genio, de al menos uno de sus espíritus. Pues ésta será nuestra hipótesis o más bien nuestra toma de partido: hay más de uno, debe haber más de uno." — Jacques Derrida

"Los hombres hacen su propia historia, pero no la hacen a su libre arbitrio, bajo circunstancias elegidas por ellos mismos, sino bajo aquellas circunstancias con que se encuentran directamente, que existen y les han sido legadas por el pasado. La tradición de todas las generaciones muertas oprime como una pesadilla el cerebro de los vivos. Y cuando éstos aparentan dedicarse precisamente a transformarse y a transformar las cosas, a crear algo nunca visto, en estas épocas de crisis revolucionaria es precisamente cuando conjuran temerosos en su auxilio los espíritus del pasado, toman prestados sus nombres, sus consignas de guerra, su ropaje, para, con este disfraz de vejez venerable y este lenguaje prestado, representar la nueva escena de la historia universal" Karl Marx

20/4/14

Kautsky y Lenin sobre la República y el Estado

Lenin ✆ Puspa Nairula
Lars T. Lih  |  A finales de 1904, Karl Kautsky escribió una serie de artículos bajo el título general de La república y la socialdemocracia en Francia. Las reflexiones de Kautsky sobre la posición marxista ante la república surgieron de un debate entre los socialistas europeos sobre la conveniencia o no de que los socialistas participaran en un gobierno burgués, como en el caso de Alexandre Millerand en Francia. Los marxistas ortodoxos como Kautsky se opusieron a la presencia de Millerand en el gabinete francés. Su crítica de la Tercera República “burguesa” en Francia fue tan vehemente que algunos socialdemócratas alemanes llegaron a la conclusión que los marxistas tenían prejuicios contra la república como forma de organización política. Tal vez los marxistas eran políticamente indiferentes; tal vez incluso preferían una monarquía, como la alemana.

Kautsky tomó la pluma para rechazar esas sospechas y aclarar la posición marxista, algo complicada, hacia la república. Los marxistas estaban lejos de ser políticamente indiferentes, afirmaba Kautsky: apoyan firmemente la república, y en particular, creen que la república democrática es la única forma posible de dictadura del proletariado. Pero la Tercera República burguesa francesa no era muy democrática. De hecho, se ha descrito con precisión como una "monarquía sin monarca" [1].


Una de las tareas de los socialdemócratas en países como Francia y los EE.UU. era luchar contra las "supersticiones republicanas" que llevaban a los trabajadores a subestimar la ferocidad de la lucha de clases, incluso en una república parlamentaria. Al mismo tiempo, los trabajadores franceses podían y debían sentirse orgullosos de ciertos episodios de la tradición republicana: la Primera República (1792-1804) y la Comuna de París (1871).

Para defender su posición, Kautsky hizo primero un repaso de la historia de la lucha de clases en Francia, desde la revolución de 1789 hasta la Tercera República, que había surgido de las ruinas humeantes de la Comuna de París en la década de 1870. Luego, en la segunda mitad de su serie de artículos, lanzó una crítica a gran escala contra las instituciones y políticas de la Tercera República “burguesa” desde el punto de vista del socialismo proletario. Las 90 páginas del libro tuvieron un importante impacto en su época. En Rusia, por ejemplo, se publicó una traducción poco después de la edición original en alemán. En los primeros años de la Unión Soviética, en los que las obras de Kautsky se siguieron publicando en grandes ediciones, La república y la social democracia en Francia fue de nuevo reeditada.

Hoy, el folleto de Kautsky duerme en el olvido, a excepción de pequeñas discusiones  de especialistas en Kautsky, pero hay buenas razones para ponerlo de nuevo en circulación. No hay tantos estudios en profundidad sobre cuestiones estrictamente políticas de marxistas importantes como para que podamos darnos el lujo de descuidar uno de este calibre. El enfoque marxista de Kautsky de la historia revolucionaria francesa y sus análisis de las instituciones políticas francesas conservan su valor, tanto por su contenido como por su método. Por lo tanto, Ben Lewis es digno de elogio por facilitarnos el acceso a este folleto de Kautsky en inglés. Estoy seguro que rápidamente será considerado como uno de los principales estudios marxistas sobre la república como forma de organización política. Hay otra razón por la que encuentro el tratado de Kautsky un documento histórico fascinante: no fue citado por Lenin en El estado y la revolución (1917). El resto de mis comentarios se dedicarán a explicar el significado de esta ausencia.

La crítica de Lenin a Kautsky

Lenin tuvo una larga relación de amor / odio con Kautsky durante toda su vida. La mayoría de nosotros estamos familiarizados con la parte de odio, que se manifestó a partir de 1914 en las denuncias casi obsesivas de Lenin contra Kautsky como un "renegado" que había traicionado el socialismo. La investigación actual está sacando a la luz el otro lado de esa relación.

Para Lenin, como para casi todos los socialdemócratas rusos, los escritos de Kautsky eran la regla de oro de la ortodoxia marxista. Todos los socialdemócratas rusos invocaban constantemente a Kautsky como una autoridad casi inmaculada durante las disputas ideológicas en el seno de la socialdemocracia rusa. Pero la intensidad de la relación de Lenin con los escritos de Kautsky va mucho más allá. En efecto, Kautsky fue uno de los mentores ideológicos de Lenin en todas las etapas de su carrera, por lo menos hasta 1917. Paradójicamente, incluso el programa de Lenin de 1914-1917, a pesar de denunciar abiertamente la posición de Kautsky, se basaba explícitamente en sus escritos de antes de la guerra. Lenin nunca lo ocultó y de hecho hace constantemente hincapié en los méritos de "Kautsky, cuando aún era un marxista": es decir, hasta 1914.

Sólo en una ocasión criticó Lenin públicamente algo escrito por "Kautsky, cuando aún era un marxista". Esta crítica se produjo en la última sección de El estado y la revolución de Lenin. Sin embargo, esta sección también muestra la ambivalencia de Lenin acerca de Kautsky en todo su esplendor. La sección comienza con un elogio efusivo (e históricamente preciso) de la función de Kautsky como mentor de la socialdemocracia rusa. Aunque Lenin ataca a continuación La revolución social (1902) y El camino al poder (1909) de Kautsky por sus "evasivas" sobre el Estado, Lenin no puede por menos de subrayar que ambos libros contienen "una gran cantidad de material valioso", y ponen de manifiesto "la gran promesa de la socialdemocracia alemana antes de la guerra ".

En su mayor parte, la crítica de Lenin en El estado y la revolución no está dirigida a lo que dice Kautsky, sino a lo que no dice. El argumento de Lenin es que Kautsky evita cualquier discusión sobre el estado en algunas obras influyentes, escritas específicamente para refutar el "oportunismo". En particular, Kautsky no habla de las instituciones democráticas radicales de la Comuna de París ni de la necesidad de "destruir el estado", aunque estos temas forman parte importante del legado de Marx y Engels.

Demostrar algo en negativo - en este caso, que Kautsky no habla de ciertos temas- es siempre una tarea difícil. Lenin escribió El estado y la revolución en 1917, durante su exilio en Suiza y después de su regreso a Rusia. No tenía ni acceso ni tiempo para hacer una búsqueda de los escritos de Kautsky. Por lo tanto, titulo la sección correspondiente de su crítica "La polémica de Kautsky contra los oportunistas": es decir, se limitó a tratar solo algunas obras importantes. Pero nunca se señala esta autolimitación, y la mayoría de los lectores terminan El estado y la revolución con la idea de que Kautsky repudió explícitamente los ideales democráticos de la Comuna y que se oponía a cualquier forma de "destrucción del estado".

Surge, por lo tanto, la pregunta: ¿trató Kautsky este tema en otros trabajos, y, en caso afirmativo, cuáles eran sus puntos de vista? Tratar de responder esta pregunta me llevó, en primer lugar, a desenterrar el folleto largamente olvidado de Kautsky sobre la República Francesa. Estoy seguro de que Lenin leyó el trabajo de Kautsky en 1904-1905, cuando fue publicado por primera vez, aunque no hay referencias específicas a él en sus escritos. Sin embargo, parece haberlo olvidado cuando escribió El Estado y la Revolución en 1917. ¿Qué nos dice el texto de Kautsky acerca de su actitud hacia las instituciones políticas de la Comuna de París o sobre la necesidad de "destruir el estado"?

El “ideal de la Comuna”

En los extractos traducidos por Ben Lewis, encontramos el relato de la Segunda República (1848-1850) y de la Comuna de París (1871) de Kautsky. Al final de esta sección, Kautsky escribe: "establecer el ideal político de la Comuna no es tan fácil, ya que se enfrentaron en su seno varias tendencias. Pero en lo fundamental todas las reivindicaciones prácticas y los esfuerzos organizativos de la Comuna surgieron del mismo tipo de república democrática que ya había sido establecido por la Gran Revolución [de 1789]”. A continuación, Kautsky cita página y media de La guerra civil en Francia de Marx, en la que este elogia las instituciones políticas de la Comuna.

Entre los puntos concretos mencionados por Marx en esta cita se encuentran la supresión del ejército permanente, los mandatos breves para los funcionarios electos, el control democrático local de la policía, los salarios de obreros para los burócratas, y la descentralización. Marx termina diciendo: 
"Mientras que los órganos puramente represivos del viejo Poder estatal habían de ser amputados, sus funciones legitimas serían arrancadas a una autoridad que usurpaba una posición preeminente sobre la sociedad misma, para restituirlas a los servidores responsables de esta sociedad" para Kautsky, estas instituciones políticas fueron la república democrática ideal que "el proletariado de París ha creado como una herramienta para su emancipación".
Durante el resto de su argumentación, Kautsky utiliza estas características de la república democrática ideal como un modelo para una crítica de las instituciones de la Tercera República francesa. Y encuentra que, en todos los sentidos, la república real estuvo muy por debajo del estándar creado por la Comuna de París. Después de una extensa discusión de la corrupción y la decadencia del "parlamentarismo" realmente existente, Kautsky concluye:
"La corrupción burocrática rusa o la corrupción republicana estadounidense: estos son los dos extremos entre los cuales oscila y debe oscilar la vida y el bienestar de todos los grandes estados capitalistas. Sólo el socialismo puede ponerle fin por medio de una  organización [estatal] como la que la Comuna de París comenzó a crear: es decir, por medio de la expansión más amplia del auto-gobierno, la elección popular de todos los funcionarios y la subordinación de todos los miembros de los órganos de representación al control y la disciplina del pueblo organizado. Ya en la actualidad, la mejor manera de luchar contra la corrupción parlamentaria es a través de la formación de un partido proletario grande, estrictamente disciplinado... Gracias a su constitución básica, la actual república francesa puede disfrutar de todas las ventajas de la unión parlamentaria con la corrupción burocrática".
Por lo tanto, debemos concluir que, contrariamente a la impresión que se desprende de El estado y la revolución, Kautsky suscribió el ideal de la Comuna, lo presentó a sus lectores (incluyendo los lectores rusos), y lo usó como base de una crítica mordaz a la “república burguesa” existente en Francia.

Antes de seguir, será útil una aclaración conceptual. En 1917, Lenin llamó a establecer una "república soviética", pero este ideal político no debe oponerse a la república democrática. La democracia al estilo soviético es una forma institucional de la república democrática. Si es o no la forma más conveniente es, por supuesto, una cuestión abierta al debate. Lenin contrapone la democracia al estilo soviético a la "democracia burguesa" y al "parlamentarismo burgués", pero de ninguna manera estaba rechazando el ideal de la democracia representativa.

Del mismo modo, a pesar de que Kautsky defendió tenazmente la "república democrática" como objetivo y defendió la democracia representativa, fue explícito a la hora de no avalar las repúblicas y los parlamentos existentes. Por razones obvias, Kautsky no emplea el vocabulario de la "democracia soviética" en 1904. Sin embargo, Kautsky defiende una democratización radical de las instituciones políticas existentes en todos los países europeos, tanto en las monarquías como en las repúblicas. No debemos permitir que la dejadez conceptual oculte las grandes similitudes de los ideales políticos de Lenin y Kautsky, por muy importantes que fuesen sus diferencias en otros temas.

"¡Destruir el Estado!”

Antes de embarcarse en el tema "¡Destruir el Estado!", será también útil una aclaración preliminar.

Esta llamativa consigna tiene al menos tres significados principales. Hacer estas distinciones no es sólo una cuestión de análisis lógico. Cada sentido se refiere a un escenario distinto de la revolución, y estos escenarios puede ser defendidos por personas con agendas muy distintas. No hay contradicción lógica en defender uno o varios de estos escenarios y rechazar el resto. Estos posibles significados de "¡Destruir el Estado!" deben de quedar claros antes de acudir a los textos.
  • El escenario anarquista. De acuerdo con los anarquistas, el Estado es la fuente de todos los males, y por lo tanto el primer deber de un revolucionario socialista es arrasar todas las estructuras de autoridad centralizadas, incluyendo las democráticas.
  • El escenario democratización. Si se define el Estado como una herramienta de explotación de clase que sitúa a una parte de la sociedad por encima de la otra, entonces una democratización plena que supere la alienación entre la sociedad y sus órganos de toma de decisiones equivale a destruir el estado.
  • El escenario "arte de la revolución". Una de las lecciones extraídas por Marx y Engels de las revoluciones fallidas de 1848 fue la necesidad de evitar que las fuerzas contrarrevolucionarias utilicen el aparato represivo del Estado para aplastar la revolución. Dejar las viejas estructuras intactas es extremadamente peligroso. Tienen que ser destruidas.
Hay otro importante significado de "¡Destruir el Estado!" que yo llamo el escenario "descomposición y reconstitución", pero este significado es irrelevante para nuestra discusión. Las breves descripciones de los diferentes escenarios que se ofrecen tienen como objetivo esencial demostrar que la “destrucción del estado” puede entenderse de manera muy distintas.

¿Cuál fue la posición de Lenin sobre los distintos escenarios hasta 1917? Si tenemos en cuenta El estado y la revolución junto con todo lo demás que Lenin decía en 1917 (un procedimiento necesario pero no siempre seguido), nos encontramos con que Lenin rechazó enérgicamente el escenario anarquista de la destrucción inmediata del Estado. Un estudioso de Lenin, Neil Harding, equipara “¡Destruir el Estado!” con el anarquismo y dice que, en 1917, Lenin inscribió el grito de guerra del icono anarquista Mikhail Bakunin en su bandera. Esta afirmación es totalmente engañosa. Por el contrario, cuando Lenin hablaba de “destruir el estado” , lo que tenía en mente eran los otros dos escenarios: la democratización y el “arte de la revolución” - a pesar de que no siempre tuvo el cuidado suficiente de separar estos dos significados.

Pasemos ahora a Kautsky. Nadie discutirá que Kautsky rechaza la hipótesis anarquista. En las secciones anteriores, hemos visto que también abogó firmemente por un programa de democratización amplio y radical de las estructuras políticas existentes. ¿Qué pasa con el escenario “arte de la revolución” de destrucción del aparato represivo del Estado? El artículo de 1904 de Kautsky proporciona también información de cuales eran sus puntos de vista sobre este tema.

Kautsky argumenta que los jacobinos "pequeños burgueses" de la Revolución Francesa fueron capaces de lograr todo lo que hicieron porque "destruyeron [zerstört] los instrumentos de dominación de las clases dominantes": es decir, la iglesia, la burocracia y el ejército. A continuación, extrae la lección para los revolucionarios proletarios posteriores:
“El proletariado, así como la pequeña burguesía, nunca será capaz de gobernar el Estado a través de estos instrumentos de gobierno. Esto no es sólo debido a que el cuerpo de oficiales, la parte superior de la burocracia y la iglesia siempre han sido reclutados entre las clases altas y están íntimamente vinculados a ellas, sino también porque la propia naturaleza de estos cuerpos como instrumentos de gobierno implica que traten de elevarse por encima de la masa de la gente con el fin de gobernarla, en vez de servirla. Siempre serán mayoritariamente anti-democráticos y aristocráticos...
“La conquista del poder del estado por el proletariado, por lo tanto, no significa simplemente la conquista de los ministerios [existentes], para luego, sin más, utilizar estos viejos instrumentos de gobierno – la iglesia oficial estatal, la burocracia y el cuerpo de oficiales - en un sentido socialista. Por el contrario, significa la disolución "[Auflösung] de estos instrumentos de gobierno”.
Las dos palabras clave en la argumentación de Kautsky son zerstört y Auflösung. Mi diccionario alemán-inglés define zerstören como "descomponer, arruinar, destruir" y Auflösung como "disolver, desaparecer, dispersar, disolver". Por lo tanto, aunque Kautsky no haya utilizado la palabra “destruir”, su posición acerca de estos “instrumentos de gobierno” burgueses es muy poco ambigua.

Una vez que somos conscientes de la posición defendida por Kautsky en su obra de 1904 sobre la lucha de clases y la República Francesa, la crítica de Lenin de 1917 de “Kautsky, cuando aún era un marxista" pierde buena parte de su aguijón. Las posiciones políticas de los dos hombres se superponen mucho más que lo que podría esperar cualquier lector de El estado y la revolución. Sin duda, las diferencias siguen siendo muy sustanciales. Pero, cuando Gran Bretaña “celebra” (si, esa es la palabra) una "boda real", tal vez deberíamos centrarnos en el programa político común de la izquierda marxista durante los primeros años del siglo pasado: una república con instituciones radicalmente democráticas del mismo tipo que las de la Comuna.

Nota: [1] El mentor de Kautsky, Friedrich Engels, en su influyente Crítica del Programa de Erfurt (1891) argumenta de manera muy similar. Engels escribe: 
“Si una cosa es cierta es que nuestro partido y la clase obrera sólo pueden llegar al poder bajo la forma de una república democrática. Esta es incluso la forma específica de la dictadura del proletariado, como la Gran Revolución Francesa ya ha mostrado”. Además: “Así, pues, [debemos apoyar - LTL] una república unificada.. Pero no en el sentido de la actual república francesa, que no es más que el imperio fundado en 1799 sin emperador”.
Lars T. Lih estudió filosofía y ciencias políticas en las universidades de Yale, Oxford y Princeton. Fue profesor en la Universidad de Duke y el Wellesley College y actualmente enseña en la universidad McGill de Montreal, Quebec. El presente artículo es su introducción a la edición en inglés de La república y la socialdemocracia en Francia de Karl Kautsky, que no tiene aun traducción al español.
Traducción del inglés por Gustavo Buster
www.sinpermiso.info



◆ El que busca, encuentra...

Todo lo sólido se desvanece en el aire; todo lo sagrado es profano, y los hombres, al fin, se ven forzados a considerar serenamente sus condiciones de existencia y sus relaciones recíprocasKarl Marx

Not@s sobre Marx, marxismo, socialismo y la Revolución 2.0

— Notas notables
Cecilia Feijoo: Apuntes sobre el Concepto de Revolución Burguesa en Karl Marx — Red Diario Digital
Moishe Postone: Il compito della teoria critica oggi: Ripensare la critica del capitalismo e dei suoi futuri — Blackblog Franco Senia
Pierre-Yves Quiviger: Marx ou l'élimination des inégalités par la révolution — Le Point
Hernán Ouviña: Indigenizar el marxismo — La Tinta
Emmanuel Laurentin: Les historiens américains et Karl Marx — France Culture
Adèle Van Reeth: Le Capital de Karl Marx: La fabrique de la plus-value — France Culture
Manuel Martínez Llaneza: Reproches a Marx acerca de El Capital (Bajo la égida de Friedrich Engels) — Rebelión
Victoria Herrera: Marx y la historia — Buzos
Alejandro F. Gutiérrez Carmona: La vigencia del pensamiento marxista — Alianza Tex
Víctor Arrogante: El Capital y las aspiraciones de la clase trabajadora — Nueva Tribuna
Mauricio Mejía: Karl Marx, el poeta de la mercancía — El Financiero
Emmanuel Laurentin: Karl Marx à Paris: 1843-1845 — France Culture
Jacinto Valdés-Dapena Vivanco: La teoría marxista del Che Guevara — Bohemia
Aldo Casas: El marxismo como herramienta para la lucha — La necesidad de la formación en la militancia — La Tinta
Evald Vasiliévich Iliénkov: La dialéctica de lo abstracto y lo concreto en El Capital de Marx — Templando el Acero
Vincent Présumey: Suivi des écrits de Karl Marx / 1837-1848 - Part I, Part II, Part III & Part IV — Mediapart
Roman Rosdolky: Marx ésotérique et Marx exotérique — Palim Psao
Lepotier: Marx, Marxisme, Cui bono? — Bella Ciao
Andrea Vitale: La critica di Pareto a Marx: una abborracciatura — Operai e Teoria
Annelie Buntenbach: Marx provides us with a glimpse behind the scenes of capitalism — Marx 200
Antoni Puig Solé: La Ley del Valor y la ecología en Marx — Lo que somos
Vladimiro Giacché: Note sui significati di "Libertà" nei Lineamenti di Filosofia del Diritto di Hegel — Il Comunista
Salvador López Arnal: Manuel Sacristán (1925-1985) como renovador de las tradiciones emancipatorias — Rebelión
Paúl Ravelo Cabrera: Marx, Derrida, el Gesto Político y la supercapitalización mundial — Scribb
Dino Greco: In difesa del marxismo — Sollevazione
Alberto Quiñónez: Arte, praxis y materialismo histórico — Rebelión
Josefina L. Martínez: Feminismo & Socialismo marxista - Eleanor Marx, la cuestión de la mujer y el socialismo — Rebelión
John Bellamy Foster: Marx y la fractura en el metabolismo universal de la naturaleza — Scribb
José Manuel Bermudo Ávila: Concepto de Praxis en el joven Marx — Scribb
Carlos Oliva Mendoza: Adolfo Sánchez Vázquez: ¿marxismo radical o crítica romántica? — InfoLibre
Bernardo Coronel: ¿El marxismo es una ciencia? — La Haine
Sylvain Rakotoarison: Le capitalisme selon Karl Marx — Agora Vox

— Notas y comentarios sobre El Capital
António Ferraz: Os 150 anos do livro ‘O Capital’, de Karl Marx — Correio do Minho
Horacio Tarcus: Traductores y editores de la “Biblia del Proletariado” - Parte I & Parte II — Memoria
Emmanuel Laurentin: Le Capital, toujours utile pour penser la question économique et sociale? — France Culture
J.M. González Lara: 150 años de El Capital — Vanguardia
Roberto Giardina: Il Capitale di Marx ha 150 anni — Italia Oggi
Alejandro Cifuentes: El Capital de Marx en el siglo XXI — Voz
Marcela Gutiérrez Bobadilla: El Capital, de Karl Marx, celebra 150 años de su edición en Londres — Notimex
Mario Robles Roberto Escorcia Romo: Algunas reflexiones sobre la vigencia e importancia del Tomo I de El Capital — Memoria
Antoni Puig Solé: El Capital de Marx celebra su 150° aniversario — Lo que Somos
Jorge Vilches: El Capital: el libro de nunca acabar — La Razón
Carla de Mello: A 150 años de El Capital, la monumental obra de Karl Marx — Juventud Socialista del Uruguay
Rodolfo Bueno: El Capital cumple 150 años — Rebelión
Diego Guerrero: El Capital de Marx y el capitalismo actual: 150 años más cerca — Público
José Sarrión Andaluz & Salvador López Arnal: Primera edición de El Capital de Karl Marx, la obra de una vida — Rebelión
Sebastián Zarricueta: El Capital de Karl Marx: 150 años — 80°
Marcello Musto: La durezza del 'Capitale' — Il Manifesto
Esteban Mercatante: El valor de El Capital de Karl Marx en el siglo XXI — Izquierda Diario
Michael Roberts: La desigualdad a 150 años de El Capital de Karl Marx — Izquierda Diario
Ricardo Bada: El Capital en sus 150 años — Nexos
Christoph Driessen: ¿Tenía Marx razón? Se cumplen 150 años de edición de El Capital — El Mundo
Juan Losa: La profecía de Marx cumple 150 años — Público
John Saldarriaga: El Capital, 150 años en el estante — El Colombiano
Katia Schaer: Il y a 150 ans, Karl Marx publiait ‘Le Capital’, écrit majeur du 20e siècle — RTS Culture
Manuel Bello Hernández: El Capital de Karl Marx, cumple 150 años de su primera edición — NotiMex
Ismaël Dupont: Marx et Engels: les vies extravagantes et chagrines des deux théoriciens du communisme! — Le Chiffon Rouge
Jérôme Skalski: Lire Le Capital, un appel au possible du XXIe siècle - L’Humanité
Sebastiano Isaia: Il Capitale secondo Vilfredo Pareto — Nostromo

— Notas y reportajes de actualidad
Román Casado: Marx, Engels, Beatles, ese es el ritmo de Vltava — Radio Praga
María Gómez De Montis: El Manifiesto Comunista nació en la Grand Place — Erasmus en Flandes
Enrique Semo: 1991: ¿Por qué se derrumbó la URSS? — Memoria
Michel Husson: Marx, un économiste du XIXe siècle? A propos de la biographie de Jonathan Sperber — A L’Encontre
César Rendueles: Todos los Marx que hay en Marx — El País
Alice Pairo: Karl Marx, Dubaï et House of cards: la Session de rattrapage — France Culture
Sebastián Raza: Marxismo cultural: una teoría conspirativa de la derecha — La República
Samuel Jaramillo: De nuevo Marx, pero un Marx Nuevo — Universidad Externado de Colombia
Sergio Abraham Méndez Moissen: Karl Marx: El capítulo XXIV de El Capital y el “descubrimiento” de América — La Izquierda Diario
Joseph Daher: El marxismo, la primavera árabe y el fundamentalismo islámico — Viento Sur
Francisco Jaime: Marxismo: ¿salvación a través de la revolución? — El Siglo de Torreón
Michel Husson: Marx, Piketty et Aghion sur la productivité — A l’encontre
Guido Fernández Parmo: El día que Marx vio The Matrix — Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires
Cest: Karl Marx y sus "Cuadernos de París" toman vida con ilustraciones de Maguma — El Periódico
Leopoldo Moscoso: 'Das Kapital': reloading... — Público
Laura "Xiwe" Santillan: La lucha mapuche, la autodeterminación y el marxismo — La Izquierda Diario
José de María Romero Barea: Hölderlin ha leído a Marx y no lo olvida — Revista de Letras
Ismaël Dupont: Marx et Engels: les vies extravagantes et chagrines des deux théoriciens du communisme! — Le Chiffon Rouge Morlai
Francisco Cabrillo: Cómo Marx cambió el curso de la historia — Expansión
El “Dragón Rojo”, en Manchester: Cierran el histórico pub donde Marx y Engels charlaban "entre copa y copa" — BigNews Tonight
Marc Sala: El capitalismo se come al bar donde Marx y Engels debatían sobre comunismo — El Español

— Notas sobre debates, entrevistas y eventos
Fabrizio Mejía Madrid: Conmemoran aniversario de la muerte de Lenin en Rusia — Proceso
Segundo Congreso Mundial sobre Marxismo tendrá lugar en Beijing — Xinhua
Debate entre Andrew Kliman & Fred Moseley — Tiempos Críticos
David McNally & Sue Ferguson: “Social Reproduction Beyond Intersectionality: An Interview” — Marxismo Crítico
Gustavo Hernández Sánchez: “Edward Palmer Thompson es un autor que sí supo dar un giro copernicano a los estudios marxistas” — Rebelión
Alberto Maldonado: Michael Heinrich en Bogotá: El Capital de Marx es el misil más terrible lanzado contra la burguesía — Palabras al Margen
Leonardo Cazes: En memoria de Itsván Mészáros — Rebelión (Publicada en O Globo)
Entrevista con István Mészáros realizada por la revista persa Naghd’ (Kritik), el 02-06-1998: “Para ir Más allá del Capital” — Marxismo Crítico
Rosa Nassif: “El Che no fue solo un hombre de acción sino un gran teórico marxista” Agencia de Informaciones Mercosur AIM
Entrevista a Juan Geymonat: Por un marxismo sin citas a Marx — Hemisferio Izquierdo
Juliana Gonçalves: "El Capital no es una biblia ni un libro de recetas", dice José Paulo Netto [Português ] — Brasil de Fato
Entrevista a Michael Heinrich: El Capital: una obra colosal “para desenmascarar un sistema completo de falsas percepciones” — Viento Sur
Alejandro Katz & Mariano Schuster: Marx ha vuelto: 150 años de El Capital. Entrevista a Horacio Tarcus — La Vanguardia
Salvador López Arnal: Entrevista a Gustavo Hernández Sánchez sobre "La tradición marxista y la encrucijada postmoderna" — Rebelión
Jorge L. Acanda: "Hace falta una lectura de Marx que hunda raíces en las fuentes originarias del pensamiento de Marx" — La Linea de Fuego

— Notas sobre Lenin y la Revolución de Octubre
Guillermo Almeyra: Qué fue la Revolución Rusa — La Jornada
Jorge Figueroa: Dos revoluciones que cambiaron el mundo y el arte — La Gaceta
Gilberto López y Rivas: La revolución socialista de 1917 y la cuestión nacional y colonial — La Jornada
Aldo Agosti: Repensar la Revolución Rusa — Memoria
Toni Negri: Lenin: Dalla teoria alla pratica — Euronomade
Entretien avec Tariq Ali: L’héritage de Vladimir Lénine — Contretemps
Andrea Catone: La Rivoluzione d’Ottobre e il Movimento Socialista Mondiale in una prospettiva storica — Marx XXI
Michael Löwy: De la Revolución de Octubre al Ecocomunismo del Siglo XXI — Herramienta
Serge Halimi: Il secolo di Lenin — Rifondazione Comunista
Víctor Arrogante: La Gran Revolución de octubre — El Plural
Luis Bilbao: El mundo a un siglo de la Revolución de Octubre — Rebelión
Samir Amin: La Revolución de Octubre cien años después — El Viejo Topo
Luis Fernando Valdés-López: Revolución rusa, 100 años después — Portaluz
Ester Kandel: El centenario de la Revolución de octubre — Kaos en la Red
Daniel Gaido: Come fare la rivoluzione senza prendere il potere...a luglio — PalermoGrad
Eugenio del Río: Repensando la experiencia soviética — Ctxt
Pablo Stancanelli: Presentación el Atlas de la Revolución rusa - Pan, paz, tierra... libertad — Le Monde Diplomatique
Gabriel Quirici: La Revolución Rusa desafió a la izquierda, al marxismo y al capitalismo [Audio] — Del Sol

— Notas sobre la película “El joven Karl Marx”, del cineasta haitiano Raoul Peck
Eduardo Mackenzie:"Le jeune Karl Marx ", le film le plus récent du réalisateur Raoul Peck vient de sortir en France — Dreuz
Minou Petrovski: Pourquoi Raoul Peck, cinéaste haïtien, s’intéresse-t-il à la jeunesse de Karl Marx en 2017? — HuffPost
Antônio Lima Jûnior: [Resenha] O jovem Karl Marx – Raoul Peck (2017) — Fundaçâo Dinarco Reis
La película "El joven Karl Marx" llegará a los cines en el 2017 — Amistad Hispano-Soviética
Boris Lefebvre: "Le jeune Karl Marx": de la rencontre avec Engels au Manifeste — Révolution Pernamente

— Notas sobre el maestro István Mészáros, recientemente fallecido
Matteo Bifone: Oltre Il Capitale. Verso una teoria della transizione, a cura di R. Mapelli — Materialismo Storico
Gabriel Vargas Lozano, Hillel Ticktin: István Mészáros: pensar la alienación y la crisis del capitalismo — SinPermiso
Carmen Bohórquez: István Mészáros, ahora y siempre — Red 58
István Mészáros: Reflexiones sobre la Nueva Internacional — Rebelión
Ricardo Antunes: Sobre "Más allá del capital", de István Mészáros — Herramienta
Francisco Farina: Hasta la Victoria: István Mészáros — Marcha
István Mészáros in memoriam : Capitalism and Ecological Destruction — Climate & Capitalism.us