31/5/14

Karl Marx: Sobre la guerra franco-prusiana

Batalla de Beaumont
Manuel Taibo  |  Alemania llevaba la guerra contra Napoleón I en alianza con Rusia. Con la Santa Alianza, constituida después de las victorias contra Napoleón (1814-1815), la Rusia zarista adquirió una influencia considerable en lo que se refiere a política internacional, haciendo el papel de “gendarme de Europa”. Tienen que recordar que, después de la guerra de independencia contra el primer Napoleón, Alemania quedó durante muchas generaciones posternada a los pies del Zar. En cuanto a Prusia, se vio, según la expresión de Marx, siendo la “quinta rueda de la carroza de los Estados europeos”.

El plebiscito fue decidido por Napoleón III para consolidar el Imperio y contener la agitación republicana en el país. El 8 de mayo de 1870 el pueblo se vio invitado a dar su opinión sobre algunas reformas liberales del Gobierno y las innovaciones que introducía en la Constitución. Se obtuvieron así 7.358.786 votos por la nueva Constitución y, en consecuencia, por el Imperio; 1.894.681 abstenciones. El plebiscito como una gran victoria del emperador francés sobre la clase obrera francesa, y que fue la señal del asesinato, no de un individuo, sino de naciones.

30/5/14

Lectura sociológica de la precariedad del trabajo asalariado

Miguel Ángel Vite Pérez  |  finales de los años setenta del siglo xx y durante el siguiente decenio, se empezó a señalar —en algunos estudios de carácter sociológico y económico— el fin del trabajo ante la proliferación del desempleo y el subempleo, acompañados por el establecimiento de una política económica neoliberal, que desde un punto de vista general, intentaba transformar al mercado y a sus agentes, como productores o empresarios, en los nuevos protagonistas de un crecimiento económico vinculado con la supuesta expansión del comercio internacional.

Sin afán de polemizar, la crisis del trabajo asalariado remite a la situación compleja de la sociedad del trabajo, en la que el empleo asalariado se convirtió, en los países desarrollados, en el principal medio para obtener un conjunto de bienes y servicios, garantizados por un sistema de bienestar estatal y establecidos como derechos. Esto significa que el trabajo concedía un estatus de derechos frente a los inconvenientes creados por la propia dinámica económica capitalista: desempleo, enfermedad, pobreza.

27/5/14

El golpe suave planetario y la industria cultural del imperialismo estadounidense-occidental | A través de Nietzsche y de Marx…

Karl Marx & Friedrich Nietzsche
✆ A.d
Luís Eustáquio Soares  |  1. Trenzar un texto con las siguientes cabelleras. Una de Nietzsche. El último cristiano muerto en la cruz. Otra de Marx. La dialéctica de Hegel constituye un método molesto, pero está cabeza-abajo. Otra de Wittgenstein. No existe otro lugar para tener una idea de lo que hay, sino en el estado civil de las contradicciones y en su estado en el mundo civil. Cualquier otra dimensión, para entender cualquier fenómeno, tenderá a volverse mera especulación o simplemente una metafísica mortal.

2. A través de Nietzsche y de Marx, considerar los siguientes conceptos: uno de Deleuze y Guattari. La palabra orden, así definida en Mil mesetas: la unidad mínima del lenguaje no es el fonema sino la palabra de orden, que funciona como el parásito de la lengua, estando tanto más presente cuando más la suponemos ausente. Está, pues, en las tranquilas conversaciones de los trabajadores que disfrutan el derecho sagrado a las vacaciones. Está en el cariño de un padre burgués al hijo. Está en el “Yo te amo” de una pareja de enamorados.

3. En su variación infinita, una palabra de orden carga siempre en sí una sentencia de muerte.

El ‘Marx Global’ de Jan Hoff

Vincent Chanson & Frédéric Monferrand  |  El libro de Jan Hoff Marx Global representa sin duda el estudio más completo de las diferentes interpretaciones de la crítica marxiana de la economía política desde los años 60 hasta la actualidad. En esta entrevista, el autor presenta las cuestiones principales de este trabajo, reexamina las grandes interpretaciones y propone descentrar nuestro enfoque de Marx poniendo en primer plano algunos debates ampliamente ignorados en Europa o en los Estados Unidos.
En tu libro, Marx Global1, propones una cartografía exhaustiva y ambiciosa de los debates en economía política marxista desde 1965. Puedes presentarnos los objetivos principales de esta obra? Por que las interpretaciones de Marx deben ser examinadas a la luz de su contexto de elaboración geográfico, social y político?
J.H.: El objetivo principal de Marx Global hace referencia al contexto específico de Alemania, donde siempre ha habido una cantidad considerable de investigaciones sobre Marx y su crítica de la economía política. Hoy, existen tres revistas alemanas dedicadas no solamente al marxismo en general (como es el caso, por ejemplo, de Actuel Marx) sino a los “estudios marxianos” (o a la “marxología” como habría dicho Maximilien Rubel). En Alemania, mucha gente sigue leyendo El Capital y participan en debates que giran en torno a cuestiones metodológicas, la teoría del valor, la teoría de las crisis, etc.

25/5/14

Abolir el dinero no destruirá el capitalismo | Sobre la polémica entre Marx y Proudhon

Karl Marx & Pierre-Joseph Proudhon
Alejandro Pérez  |  Escuchamos de vez en cuando en los medios anticapitalistas que una posible manera de destruir el sistema económico imperante sería la de destruir o abolir el dinero. Esta idea surgió, en sus comienzos, de los textos de Proudhon. Basándome en los escritos del marxista Moishe Postone sobre la cuestión -que recupera la crítica de Marx sobre este asunto- voy a intentar exponer y resumir el porqué del error en la que cae esta concepción del capitalismo y de la peligrosidad de la misma (tanto a nivel epistémico como a nivel de consecuencias políticas directas, que son esencialmente el antisemitismo y la inoperancia). Detrás de la idea de abolir el dinero, muchas veces suele seguir un silencio o de una apología directa del capitalismo industrial así como de la tecnología y del trabajo concreto en oposición al capitalismo financiero o ciertos aspectos “abstractos” del capital y del trabajo.

24/5/14

La edición facsimilar de la revista ‘Pasado & Presente’ | Publicación fundamental en la renovación teórica y cultural del marxismo en la Argentina

Pasado y Presente fue una de las publicaciones fundamentales en la renovación teórica y cultural del marxismo en la Argentina. Dirigida en su primer año de vida por Oscar del Barco y Aníbal Arcondo, sumándose a partir de su segundo año José Aricó, Samuel Kieczkovsky, Juan Carlos Torre, Héctor Schmucler, César Guiñazú, Carlos Assadourian, Francisco Delich, Luis J. Prieto y Carlos R. Giordano, su primera época se prolongó, de 1963 a 1965, a lo largo de nueve números. Ocho años después, la revista reaparecería, bajo la dirección de José Aricó, en una breve segunda época.

La crítica al partido comunista, la difusión del pensamiento de Gramsci y otros clásicos del marxismo, la publicación de numerosos artículos de intelectuales de izquierda contemporáneos –sobre todo italianos–, la discusión en torno a la lucha armada y el mundo obrero cordobés, la relación entre cultura y política, caracterizaron a la revista durante su primera epóca. Ya en otro contexto, el acercamiento a la izquierda peronista se evidencia en los números aparecidos en 1973. Cabe mencionar, además, la publicación por parte del grupo, a partir de 1968, de los Cuadernos de Pasado y Presente, los cuales resultaron claves para

Digiriendo a Thomas Piketty | Solo el título de su libro evoca a Karl Marx

Paul Krugman & Thomás Piketty bajo la lluvia 
Gabriela Esquivada  |  En 2003, cuando Francia se opuso a la invasión de Irak, el congresista republicano Bob Ney rebautizó las papas fritas, French fries, como Freedom fries en el menú de las cafeterías del Congreso. Algunos restoranes emularon al político de Ohio (quien dos años después renunció a su banca tras declararse culpable de conspiración y de haber mentido para favorecer a Jack Abramoff, lobbysta generoso en sus regalos y donaciones de campaña), y obtuvieron algunos minutos de publicidad gratuita mientras las cámaras de los canales locales vaciaban en los baños botellas de vino francés.

Ney y los restaurateurs recordaron un matiz particular del patriotismo estadounidense: la francofobia. Por ella resulta triplemente extraño el éxito masivo (está tercero en la lista de más vendidos de The New York Times y número dos en Amazon.com) de "El capital en el siglo XXI", libro del profesor de la École D'Économie de Paris Thomas Piketty.

22/5/14

Humanismo clásico, humanismo marxista | A propósito de Ludovico Silva

Karl Marx ✆ Uncas 
Nelson Guzmán  |  Ludovico Silva fue un autor inconmensurable, preocupado por ofrecer a sus lectores una comprensión amplia de los temas que examinó como intelectual. Este hombre consideró que el marxismo era un humanismo, fustigó las creencias que asumió el marxismo soviético al querer dividir el pensamiento de Marx en una etapa juvenil y otra de madurez. Esa discusión hundió al marxismo en el tránsito por un falso camino. El Marx joven, según esto, sería un intelectual entusiasta entrampado en el idealismo hegeliano, correspondiendo la madurez a su momento de captación científica. Ludovico comprendió a tiempo que esta taxonomía no hacía otra cosa que enturbiar las aguas en la comprensión de las propuestas del genio de Tréveris. Marx no es divisible, ese error de interpretación lo cometió Luis Althusser. En su afán por darle una estructura a la obra de Marx, terminó construyendo un lenguaje inútil que terminaba por no comprender a Marx. Ludovico entendió que estaba en juego una interpretación holística del creador del Capital. No se podían seguir utilizando los vocablos de materialismo histórico y materialismo dialéctico. El pensador serio debía alejarse de los comentaristas y volver a la riqueza del manantial marxista. Los investigadores no podían dedicarse tan sólo a estudiar fragmentariamente la realidad o a realizar una lectura sintomal.

21/5/14

À propos du livre de Nicos Poulantzas | L’état, le pouvoir, le socialisme

Antoine Artous  |  L’État, le Pouvoir, le Socialisme (LPS par la suite) de Nicos Poulantzas[1] vient d’étre republié. La première édition, qui date de 1978, fut le point d’arrivée d’un travail marxiste sur la théorie de l’État, amorcé dans Pouvoir politique et classes sociales (Maspero 1968), puis poursuivi dans Les Classes sociales dans le capitalisme d’aujourd’hui (Seuil 1974), qui traite également de l’internationalisation du capital et des classes sociales[2], et enfin La Crise de l’État (Puf, 1976), ouvrage qu’il dirigea. C’est aussi un livre très inscrit dans la conjoncture politique de l’époque, en particulier en ce qui concerne les débats sur le passage au socialisme. Souvent on classa alors Poulantzas parmi les « eurocommunistes de gauche », courants critiques au sein des partis communistes européens qui cherchaient à penser ce passage en fonction d’une dialectique entre une majorité parlementaire et le développement de mobilisations de masse et de comités ouvriers et populaires. Des courants similaires existaient au sein du PS (CERES) et de la CFDT. La LCR participa à ces débats, notamment à travers sa revue Critique communiste[3].

Dans la préface de cette nouvelle édition, Razmig Keucheyan fait de ce livre le point de passage ou le point de départ obligé d’une analyse de l’État capitaliste et d’une réflexion sur la transition au socialisme. Mon approche est plus critique, même si, m'étant confronté aux analyses de Poulantzas dès les années 1970, je ne sous-estime pas son apport, ni l’obligation dans laquelle il met ses lecteurs de

Una crítica clasista al concepto y discurso de la Sociedad Civil

Jan Lust  |  En las últimas dos décadas, el discurso político ha sido contaminado cada vez más por el concepto y el discurso de la sociedad civil. El colapso de la antigua Unión Soviética a principios de la década de 1990 en combinación con la introducción del neoliberalismo hizo boom al concepto de la sociedad civil. Como tal, la sociedad civil renació como un discurso adecuado para los intereses del capital y en contra de las fuerzas que luchan por una sociedad en la que los seres humanos son los motores del desarrollo en lugar de los intereses y las necesidades del capital (transnacional), y en donde el desarrollo colectivo forma la base de la asignación social e individual de los recursos.

La definición y el significado del concepto de la sociedad civil han cambiado con el tiempo. El concepto tiene, sobre todo, una connotación histórica y filosófica y fue utilizado por las diferentes fuerzas políticas y organizaciones, en contextos políticos, económicos y sociales específicos, para lograr objetivos particulares de estas fuerzas políticas (Kaldor, 2005: 31-71; Fernández, 2003: 31-197). En los “días de gloria” del neoliberalismo, el concepto fue empleado como una “propuesta conservadora para reducir el papel

Consideraciones actuales sobre el ‘Capital’ de Thomas Piketty | No ha ideado un modelo que explique el capital del siglo XXI. Para ello necesitamos a un Marx, o a su equivalente actual

Foto: David Harvey
David Harvey  |  Thomas Piketty ha escrito un libro llamado El Capital en el Siglo XXI que ha causado un cierto revuelo. Defiende los impuestos progresivos y un impuesto global sobre la riqueza como la única forma de contrarrestar las tendencias hacia la creación de una forma de capitalismo “patrimonial” marcada por lo que califica como desigualdades de riqueza y renta “aterradoras”. A su vez, documenta de una forma minuciosa y difícil de refutar, cómo la desigualdad social tanto en riqueza como en renta ha evolucionado a lo largo de dos siglos, con un énfasis particular en el rol de la riqueza. Destruye la idea ampliamente extendida de que el capitalismo de libre mercado extiende la riqueza y que el mayor bastión en la defensa de libertades individuales. El capitalismo de libre mercado, cuando se hayan ausentes las intervenciones redistributivas del Estado produce olgarquías antidemocráticas, tal y como demuestra Piketty. Esta demostración ha dado alas a la indignación liberal mientras que ha enfurecido al Wall Street Journal.

El libro se ha presentado a veces como el sustituto del siglo XXI a la obra del XIX de mismo título de Karl Marx. Piketty ha negado que ésta sea su intención, lo cual parece justo dado que su libro no trata en absoluto del capital.

Karl Marx, un contemporaneo

Vladimiro Giacchè  |  Ironie della storia. Mentre in Germania viene festeggiato il 20° anniversario della fine della Repubblica Democratica Tedesca, si assiste ovunque a un grande risveglio di interesse nei confronti di quello che ne fu (inconsapevolmente) il filosofo ufficiale: Karl Marx. Soltanto in Italia da giugno ad oggi sono uscite due biografie: la traduzione del testo di Francis Wheen (Karl Marx. Una vita, Isbn edizioni, p. 400) e il volume di Nicolao Merker Karl Marx. Vita e opere (Laterza, pp. 261). Se il primo testo è avvincente, il secondo riesce a fare il miracolo: ossia a darci una panoramica completa della vita di Marx e delle linee di fondo del suo pensiero.

Merker inizia ricordando che “il pensiero di Marx sta nei suoi scritti”. Non si tratta di una banalità, ma di una doverosa cautela, visto l’uso a dir poco disinvolto che spesso si è fatto del pensiero di Marx. I testi di Marx vanno letti e collocati nel loro contesto storico. Ma non per farne altrettanti “classici” da tenere sullo scaffale, bensì per capire cosa ci possono dire sull’oggi. Questo utilizzo è possibile in quanto la struttura economica della società in cui viviamo è ancora quella descritta da Marx. Anzi, per certi aspetti il mondo attuale è

18/5/14

Una aproximación a la historiografía marxista británica | Perry Anderson, Christopher Hill & E.P. Thompson

Foto: Christopher Hill
Miguel Lagrotta  |  Dentro del programa propuesto por el Prof. Devoto el caso inglés me motivó a  desarrollar una aproximación sencilla a tres autores británicos que han trabajado mucho y en distintos planos historiográficos. Para iniciar el tema tomaremos la definición del problema propuesta por Devoto […]:
“ la historiografía inglesa es, de todas las historiografías europeas, la más empírica, en la cual el empirismo es la práctica natural del historiador y ese empirismo lleva, efectivamente, a que algunas dimensiones de la historia hayan sido muy poco desarrolladas en el siglo XX en Inglaterra como por ejemplo la filosofía de la historia. En el caso inglés la ciencia social más desarrollada es la economía, entonces uno podría decir: la historiografía inglesa es en buena medida, a lo largo del s. XX una historiografía política y cuando no es una historiografía política es una historiografía económica.” [1]
El resultado de toda investigación, incluso modesta como la presente, debe igualmente conducir a una reflexión final que debería superar y apuntalar las conclusiones. Edward P. Thompson señala al respecto que:
“Sólo nosotros, los que ahora vivimos podemos dar un “sentido” al pasado. Ahora bien, este pasado siempre ha sido, entre otras cosas, resultado de un razonamiento de valores. Al recuperar ese proceso, al mostrar cómo aconteció realmente la secuencia causal,

La paradoja de Marx y el ‘copyright’ reabre el debate

«Privatizar los textos de Marx o Engels es como ponerle marca a las palabras ‘socialismo’ o ‘comunismo’». Con este argumento, más de 6.000 personas han dirigido una queja contra la editorial Laurence & Wishart, que ha hecho valer sus derechos sobre las «Obras completas» en inglés de los pensadores alemanes y ha forzado a la web Marxist Internet Archive a retirar los textos. Una aparente ironía dentro de la lógica capitalista que reabre el debate sobre el «copyright», los beneficios y el derecho a la cultura.

Laurence & Wishart, «que dispone de los derechos de las obras completas de Marx y Engels, se ha dirigido al Marxist Internet Archive para que borremos todos los textos originarios de la colección. En consecuencia, desde el 30 de abril no tendremos este material disponible en marxists.org, aunque sí mantendremos traducciones del inglés de otras fuentes». Con este mensaje los responsables del portal,

17/5/14

Karl Marx & Thomas Piketty | Nada puede haber más diferente que la idea de ambos sobre el capital y la crisis capitalista

José Luis Lezama  |  Para algunos sectores de la población en Estados Unidos el presidente Obama es socialista. Hoy día se ha llegado a comparar al economista francés Thomas Piketty, autor del bestseller Capital en el siglo XXI, con Marx y con su obra magna El Capital. Es sorprendente esta comparación; sólo puede venir de la ignorancia o del delirio. Nada puede haber más diferente que la idea de ambos sobre el Capital y la crisis capitalista.

El Capital que preocupa a Piketty, en su relación con la creciente desigualdad que se expande en las sociedades del mundo moderno, tiene que ver con la riqueza acumulada, un stock, algo fijo, una reserva. Es éste un capital que no fluye, que no circula como inversión sino como renta y fuerza política, que instaura un orden social oligárquico, que genera privilegios, cancela la movilidad, el ascenso social, el American Dream. Para Piketty la contradicción principal del capitalismo actual, que explica la crisis y amenaza al sistema, emerge cuando la riqueza acumulada crece a una tasa mayor que el crecimiento económico, pudiendo llegar a devorar al ingreso nacional. La economía se hace instrumento de esta riqueza, generando al 1 por ciento de los más ricos y al 99 por ciento de los perdedores. Marx ubica la crisis en el ámbito de la producción, no en el de la distribución y la explica como consecuencia de una suerte de anomalía en el mecanismo de la ganancia capitalista, resumido en la "tendencia decreciente de la tasa de ganancia" que, al acercarse a cero, prepara el colapso.

16/5/14

Karl Marx y su obra en el Siglo XX | La incidencia de su traducción para el mundo contemporáneo

Karl Marx ✆ Mak 
Marta Rojano Simón  |  Desde los albores de la Humanidad, el ser humano se ha caracterizado por su continua necesidad de expandirse geográficamente, al mismo tiempo que por un anhelo de expandir sus conocimientos y transmitir sus costumbres y tradiciones a sus descendientes. El ser humano nunca se hubiera separado del resto de las especies sin la cualidad de poder pensar y expresar el fruto de sus ideas mediante el lenguaje de la misma manera que se hubiera extinguido de no haber tenido la capacidad de desplazarse por todo el mundo. Así, cada vez que llegaba a un nuevo territorio, cargado de bienes con los que llevar a cabo el trueque o deseoso de unirse en matrimonio a una mujer local para entroncarse con una tribu lejana, se encontraba con el mismo problema: la barrera lingüística, quizá más difícil de superar y lesiva para sus intereses que las distancias geográficas, la violencia de la naturaleza o la de otros seres humanos.

Así pues, podemos decir que la necesidad de hacerse entender con otras personas y grupos humanos que se entendían en una lengua diferente a la propia no es más reciente que la necesidad de conocer nuevos territorios. De este modo, no nos

Eric Hobsbawm, el marxismo y la transformación de la historiografía

Eric Hobsbawm ✆ Walter
Matari Pierre  |  Este ensayo analiza las grandes transformaciones de la historiografía contemporánea a partir de la obra de Eric Hobsbawm, fallecido en octubre de 2012 a los 95 años; unos cambios que son escudriñados a la luz del auge y la crisis del marxismo como método de análisis y herramienta de transformación sociopolítica en el siglo XX. Tras considerar la derrota de la historia narrativa y el intento de construir una historia global con un enfoque universal hasta los años 70, el artículo concluye con un balance del pesimismo tardío de Hobsbawm ante la historia neodescriptiva y relativista en boga en las últimas décadas, que para él constituyen una «gran era de mitología histórica», al calor de las políticas de la identidad actualmente en boga.

Como reflejo de los tensos vínculos entre historia global e historia inte­lectual, los trastornos de la historiogra­fía contemporánea no son inteligibles sin considerar la evolución del marxis­mo como método de análisis y como «instrumento para cambiar el mundo a través del conocimiento» 1. Esta era al menos la opinión de Eric Hobsbawm. Consideraremos esta problemática en tres tiempos: a) la derrota de la histo­riografía narrativa; b) la construcción de un punto de vista global que supe­re el eurocentrismo; y finalmente, c) el  pesimismo y la crítica del autor ante la historia neodescriptiva y relativista hoy predominante.

Marxismo, ecomarxismo y desarrollo

Karl Marx ✆ A.d. 
Ángel Custodio Velásquez  |  La ideología del progreso ha tocado fondo. Las promesas que ofreció a la humanidad desde el mismo momento en que fue concebida, han dado como resultado lo contrario de lo ofrecido: una naturaleza devastada por la irracionalidad del capital; un ser humano sobre-alienado, un medio ambiente altamente contaminado y una civilización sobre-individualizada y con patologías diversas, que hacen presagiar un futuro no muy optimista a la humanidad. El progreso y su lógica desarrollista ha generado tensiones estructurales con la naturaleza al utilizarla como recurso ilimitadamente. Estas tensiones no pueden superarse desde las teorías que nacieron en la modernidad progresista. Unas por el simplismo de sus enfoques; otras –aunque complejas- redujeron sus estudios al análisis de la producción de valor de cambio por los trabajadores, su apropiación por parte de los

15/5/14

… y Marx tenía razón!

  • “En la ciencia no hay calzadas reales, y quien aspire a remontar sus luminosas cumbres, tiene que estar dispuesto a escalar la montaña por senderos escabrosos.” | Karl Marx, Prólogo de 1872 a la edición francesa de El Capital
Pedro Peñalosa  |  1. La maleza de las ideologías pasajeras. Hoy, seguramente para sorpresa de quienes habían enterrado a Marx y vivían de las veladoras al capitalismo, será una noticia desagradable saber del auge en las ventas del libro de Thomas Piketty, (refutado con desesperación por Jason Furman, Jefe del equipo económico de Barack Obama) [Ver: La Página de Omar Montilla] sobre el capital y la desigualdad en el siglo XXI. Las piezas conceptuales del armado editorial nos recuerdan los trazos centrales del pensamiento marxiano. Circula la idea de que cuando se incrementa la lectura de Karl Marx, quiere decir que las cosas no van bien en el funcionamiento de la sociedad capitalista.

2. El marxismo y su alejamiento de visiones dogmáticas y religiosas. Lo característico del tipo de crítica representada por el marxismo, es que incluye una concepción autocrítica; el marxismo es una teoría de la historia que, a la vez, pretende ofrecer una historia de la teoría. Marx y Engels definieron las condiciones de sus descubrimientos intelectuales como la aparición de determinadas contradicciones de clase de la sociedad capitalista; no simplemente como un "estado ideal de las cosas". Así, el

14/5/14

El desarrollo de la Teoría de la distribución del plusvalor de Karl Marx en los ‘Manuscritos de 1861-63’

Karl Marx ✆ A.d. 
Fred Moseley  |  He argumentado en múltiples trabajos (Moseley 1993, 2000, 2002) que la teoría del plusvalor de Marx se estructura en términos de dos niveles básicos de abstracción: (1) la producción de plusvalor, en la que se determina la cantidad total de plusvalor en la economía como un todo y (2) la distribución del plusvalor, en la se la cantidad total de plusvalía predeterminada se divide en partes individuales (tasas de ganancia iguales, ganancia comercial, interés y renta). En la teoría de la distribución del plusvalor, la cantidad de plusvalor a ser distribuido se toma como dado, ya determinado por la anterior teoría de la producción del plusvalor. Esta premisa cuantitativa clave se repite en muchas ocasiones en todos los borradores de El Capital, especialmente en los borradores del Volumen 3 de El Capital en el Manuscrito de 1861-63 y en el Manuscrito de 1864-65. Otros autores también han enfatizado en la determinación previa del plusvalor total en la teoría de la distribución del plusvalor de Marx como: Paul Mattick, David Yaffe y Duncan Foley.

Los Grundrisse se encuentran prácticamente en su totalidad al nivel de abstracción del capital en general, el cual se divide en tres secciones: el proceso de producción del capital, el proceso de circulación del capital y una breve sección sobre el capital y la

Una crítica de las 'dos almas' de la teoría marxista del partido | Hipótesis sobre la organización política

Martín Mosquera & Tomás Callegari  |  Este texto pretende ser una introducción a un trabajo teórico de largo aliento sobre la cuestión de la organización política en la historia del movimiento socialista y la tradición marxista. Intentaremos avanzar con cautela y precaución en un terreno sedimentado por un siglo de polémicas y donde se anudan algunos de los dilemas más significativos de la estrategia socialista. Las actuales discusiones sobre la “forma-partido”, la crítica a las organizaciones burocráticas y el rechazo a la centralización, no son una novedad en el movimiento socialista. Más allá de lo abusivo de ciertas críticas, éstas señalan dificultades reales de la práctica política y puntos ciegos de la teoría marxista a atender cuidadosamente por parte de cualquier intento serio de renovar las aspiraciones emancipatorias. Es recurrente en la historia del movimiento obrero que en paralelo a

13/5/14

Marx e la WertKritik

  • La Platypus Affiliated Society, nel corso della sua quinta Convenzione Internazionale annuale, presso la Scuola d'Arte di Chicago, ha ospitato un evento dal titolo "Marx e la WertKritik", cui hanno partecipato Elmar Flatschart, della rivista Exit!, Alan Milchman, di Internationalist Perspective, e Jamie Merchant, di Permanent Crisis, moderati da Gregor Baszak, di Platypus. Quella che segue, è una trascrizione della discussione.
Karl Marx ✆ Rajasekar Alamanda 
Elmar Flatschart: La critica del valore, o, seguendo il teorema sviluppato da Roswitha Scholz, una critica della scissione-valore (Wertabspaltungskritik), cerca di capire e di criticare il meccanismo fondamentale che governa la società moderna. Questa critica non si interessa tanto al Marx politico della lotta di classe e del movimento operaio, ma più all'aspetto filosofico del suo lavoro che si focalizza sul carattere astratto e feticizzato del moderno dominio. Quest'approccio cerca di mantenere, la teoria critica della società, rigorosamente separata dai contraddittori tentativi pratici di superare il capitalismo. Il marxismo non andrebbe inteso come un portatore di identità, di una corretta posizione, che la storia ha dimostrato essere erronea, ma dovrebbe essere ridotto ad un nucleo teorico che ci può aiutare a comprendere la società, per mezzo di una critica negativa, anche se questa non ci fornisce necessariamente una via d'uscita. L'appello all'abolizione del lavoro non ha ripercussioni immediate per la politica marxista. Non c'è un nuovo programma o un piano generale che può essere sviluppato a partire dall'abolizione del valore. Piuttosto, può essere visto come una condizione per emanciparsi dal valore e dal sistema astratto di oppressione che rappresenta. Come poi l'emancipazione sarà raggiunta, questa è una storia più complessa. Sappiamo cos'è che non funziona: molto di quello che la vecchia sinistra ha proposto come politica marxista. Un bel po' del quale dovrebbe essere

Marx ha vuelto… pero por las redes sociales y las redes reales | Una original mininiserie de ficción por Internet

Javier Gabino  |  El pasado 1 de mayo tuvo lugar el lanzamiento de "Marx ha vuelto", una miniserie de ficción en cuatro capítulos, basada en el Manifiesto Comunista de la cual pude participar. Puede verse en este link el capítulo 1: Burgueses y proletarios, y el capítulo 2: El mercado y las crisis capitalistas (y cada nuevo capítulo se estrenará todos los jueves de Mayo). Entre el amplio grupo de trabajo implicado en esta realización, elegimos el día emblemático de la lucha de los trabajadores a nivel mundial para el lanzamiento, una gran fecha para hablar de Karl Marx. 

Tras la publicación online, el video saltó a distintos sitios de la izquierda, blogs político-culturales y especialmente miles de usuarios de Facebook (que crecen hora a hora) y comparten el video. El primer capítulo suma miles de seguidores por las redes sociales. Con subtítulos en inglés y francés (y

12/5/14

Thomas Piketty: ¿De la talla de Adam Smith, Karl Marx o John Maynard Keynes? | Reconoce que sólo ha leído de Marx el ‘Manifiesto del Partido Comunista’

Vicente Lozano  |  El influyente Martin Wolf, jefe de análisis del Financial Times, ha dicho con razón que Thomas Piketty ha escrito "un libro extraordinariamente importante". Le Capital au XXIe siècle (Seuil), publicado en 2013 en Francia y traducido al inglés -Capital in the Twenty-First Century (Belknap Press, 2014)- el pasado marzo lo es. Sin duda.

Se trata de una obra clave por sí misma y por el momento en el que se ha escrito. Es un documentadísimo trabajo sobre el capitalismo y la desigualdad social... que ha aparecido justo cuando la mayor crisis económica desde el crack bursátil de 1929 ha ahondado las diferencias sociales que existen en algunos de los países más desarrollados. Hablar de capitalismo, liberalismo, rentas del capital, del trabajo y desigualdad social en este tiempo postrecesión es demasiado apetitoso. Por eso, el dominical británico The Observer titulaba así una larga entrevista que hizo a Piketty el pasado 13 de abril: "Occupy tenía razón: el capitalismo ha fallado al mundo". En otras palabras, ¿ha proporcionado Piketty el cuerpo doctrinal que necesitan los movimientos antiglobalización y antisistema, desde Occupy Wall Street al 15-M, que han proliferado en todo el mundo con la crisis? ¿Se debe a ello que el economista francés haya generado la

El Capital en el siglo XXI | La distribución de las rentas del capital como determinante de la desigualdad

Manuel Bagues  |  Desde la reciente traducción al inglés de su libro Le capital au XXIe siècle, el economista francés Thomas Piketty está alcanzado el estatus de estrella de rock en los medios de comunicación. Y esto es una gran noticia porque, como bien dice Piketty, la ciencia económica (y las demás ciencias sociales) son demasiado importantes como para dejarlas únicamente en manos de los académicos. No es fácil añadir mucho más a todo lo que se ha dicho al respecto en estas últimas semanas (FT, NYTimes, Economist, Krugman y un largo etc.), pero por si acaso aún queda alguien que no haya leído este magnífico libro, que no haya seguido en directo el debate entre Piketty, Krugman, Stiglitz y Durlauf, o que le dé pereza leer las diapositivas de alguna de sus múltiples presentaciones (aquí la presentación que dio en Helsinki en Noviembre), quizás merezca la pena recordar algunas de sus principales tesis.

El libro de Piketty reúne los resultados de muchos años de trabajo y de numerosos artículos académicos. Piketty, tras completar a los 22 años una brillante tesis en teoría económica, fue contratado por el MIT. Sin embargo, al cabo de dos años decidió regresar a Europa y hacer algo que a los economistas nos suele dar mucha pereza: recoger datos. Como explica en una reciente entrevista, aunque tenía

11/5/14

El mundo musulmán, Marx y la revolución

  • La reedición de la obra mayor de Maxime Rodinson, ‘Islam y capitalismo’ *, es un acontecimiento intelectual para quienes se interesan por el mundo árabe y musulmán. Lo que sigue es el prefacio de dicho libro.
Alain Gresh  |  Las palabras son diferentes, la forma de hacer las preguntas también. Y la época ya no es la misma. Volveremos sobre ello. Sin embargo, los problemas que plantea Maxime Rodinson en este libro publicado en 1966, en particular el de la relación entre islam, desarrollo económico y capitalismo en el mundo musulmán, son de una extraña actualidad. ¿Por qué las sociedades musulmanas (y, más en general, las sociedades de lo que se llamaba entonces el tercer mundo) están “retrasadas” o “subdesarrolladas”? ¿Existen reglas propias a esas civilizaciones radicalmente distintas de las que rigen Occidente? ¿Se iluminaría ese “Oriente complicado” gracias al descifrado de las suratas del Corán, a su exégesis? Interrogantes que se han vuelto aún más acuciantes con las “primaveras árabes”.

10/5/14

Cómo escribir una crítica marxista de Thomas Piketty sin haber leído el libro

1. Asegúrese de enfatizar que la concepción de capital de Piketty difiere radicalmente de la de Marx.
2. Apunte que su modelo se opone fundamentalmente a la tendencia de la tasa de lucro a caer.
3. Señale que su solución es abiertamente reformista y que, además, requeriría de una militancia de los trabajadores en una escala no vista por lo menos desde hace un siglo.
4. Algo algo la ley del valor algo.
5. Ok, desigualdad. Pero luego no deje de señalar que Piketty no la explica.
6. Paralelamente no deje de mencionar su afiliación con Ségolène Royal y el Partido Socialista francés
7. Finja sorpresa de que ahora, por su codificación empírica, la gente se interesa por algo que desde siempre hemos sabido.
8. Lamente su confusión entre capitales financieros e industriales.
9. Arguya que, sin embargo, va a comprar el libro porque los datos pueden resultar útiles.

El pensamiento de Rosa Luxemburgo

Rosa Luxemburgo
✆  David Levine 
M. Roca Monet   [1999]  |  El pasado mes de enero se conmemoró el… [95]  aniversario del brutal asesinato de la eminente Rosa Luxemburgo. El 15 de Enero de 1919, apenas dos meses después de salir tremendamente envejecida de la cárcel de Breslau, con sólo 48 años, el gobierno contrarrevolucionario de la socialdemocracia alemana decidió que aquel cerebro teórico del marxismo tenía que dejar de pensar. Unos sicarios, oficiales del ejército, le hundieron el cráneo a golpes, que remataron con un tiro en la cabeza, haciéndole estallar el cerebro en pedazos. Su cadáver mutilado fue tirado a un canal del que no sería  rescatado hasta meses después. Un compañero de lucha, Leo Jogiches, asimismo asesinado en las jornadas de marzo, comunicó a Lenin, el máximo dirigente del partido bolchevique y de la Gran Revolución Rusa de Octubre (1917), la muerte de Rosa Luxemburg y de Karl Liebknett, en términos lapidarios: "Rosa y Karl han llevado a su extremo el deber revolucionario". 

Y es que, tanto Rosa como Karl pudieron haber huido, cuando la socialdemocracia gubernamental decidió ser “el perro sangrador” de la revolución alemana, incitando a matar a los dirigentes espartaquistas y recientes fundadores del Partido Comunista alemán (KPD). Las paredes de las calles de Berlín aparecieron con carteles que decían: “Si quieres tener pan, trabajo y paz, mata a Liebknett y Rosa Luxemburg”. El mismo diario socialdemócrata Vorwärts, en el que antaño escribiera Rosa incitaba a que la asesinaran impunemente.

Una aproximación al pensamiento de Rosa Luxemburgo

Pablo E. Slavin  |  ¿Por qué estudiar el pensamiento de Rosa Luxemburgo -1871-1919-, fallecida hace más de noventa años? ¿Qué importancia pueden tener las ideas de alguien que fue objeto de duras críticas entre sus contemporáneos compañeros de partido, e ignorada por los sectores ligados al comunismo a lo largo de todo el siglo XX? Polemista incansable, fue una de las mentes más brillantes que produjo el socialismo tras la muerte de Marx y Engels. No sólo tenía un gran conocimiento en materia de filosofía y política, sino que su capacidad en el área económica la llevó a dar clases en la escuela del Partido Socialdemócrata de Alemania. Tampoco rehuyó la lucha revolucionaria, lo que pagó con la cárcel en forma reiterada. En el presente artículo se efectúa un análisis de la vida y de algunas ideas centrales en el pensamiento de Rosa Luxemburgo, como claves para ayudar a una mejor comprensión de los problemas que el capitalismo, en su fase actual de desarrollo, nos presenta.

8/5/14

Nuovo capitalismo e nuovi schiavi

  • Mondializzazione dell'economia. Il ritorno in grande stile di forme estreme di dipendenza
Luciano Canfora  |  Una delle grandi novità del XXI secolo è il riapparire su larga scala delle forme di dipendenza schiavile e semischiavile. Un segnale in tal senso, sia pure espresso con disarmante ingenuità, si è avuto, in sede ufficiale, quando «da Oslo è partita una delegazione guidata da Ole Henning, allarmata dalle notizie sulla diffusione del caporalato nella raccolta del pomodoro nel Sud Italia» («Corriere della Sera», 23 ottobre 2013). Il riferimento è alla condizione semischiavile dei neri impiegati nelle campagne della Capitanata, di Villa Literno o di Nardò.

Beninteso, il pomodoro poco «etico» è solo la punta dell'iceberg di un fenomeno mondiale, nel quale rientrano le maestranze schiave del Sud-Est asiatico o del Bangladesh, per non parlare dei minatori neri del Sud Africa, sui quali spara ad altezza d'uomo una polizia, anch'essa fatta di neri, per i quali la meteora Mandela è passata invano. È chiaro che il profitto si centuplica se il lavoratore è

7/5/14

El fetichismo de la mercancía

  • “La riqueza (valor de uso) es atributo del hombre; el valor, atributo de las mercancías. Un hombre o una sociedad son ricos; una perla o un diamante son valiosos... Una perla o un diamante encierran valor como tal perla o diamante.”
  • “… cualquiera que sea el juicio que nos merezcan los papeles que aquí representan unos hombres frente a otros, el hecho es que las relaciones sociales de las personas en sus trabajos se revelan como relaciones personales suyas, sin disfrazarse de relaciones sociales entre las cosas, entre los productos de su trabajo.”
Karl Marx ✆ Sheri Berman 
Karl Marx  |  A primera vista, parece como si las mercancías fuesen objetos evidentes y triviales. Pero, analizándolas, vemos, que son objetos muy intrincados, llenos de sutilezas metafísicas y de resabios teológicos. Considerada como valor de uso, la mercancía no encierra nada de misterioso, dando lo mismo que la contemplemos desde el punto de vista de un objeto apto para satisfacer necesidades del hombre o que enfoquemos esta propiedad suya como producto del trabajo humano. Es evidente que la actividad del hombre hace cambiar a las materias naturales de forma, para servirse de ellas.

La forma de la madera, por ejemplo, cambia al convertirla en una mesa. No obstante, la mesa sigue siendo madera, sigue siendo un objeto físico vulgar y corriente. Pero en cuanto empieza a comportarse como mercancía, la mesa se convierte en

6/5/14

Producción capitalista / trabajo enajenado: Este mundo nuclear y su crisis política

Raya Dunayevskaya  |  La base de la economía del país imperialista más poderoso, los EE.UU., está ahora en el hecho de ser un país deudor. Las ramificaciones globales que esto implica, al igual que sus consecuencias internas, no han sido tratadas con seriedad. Paul Volcker, director de la Reserva Federal [NdelE: Este trabajo fue publicado en News & Letters, en julio de 1986] y a quien los economistas consideran el “segundo hombre más poderoso” del país, no se molestó en asistir a la Cumbre Económica [del G-7]. Se rehusó a dejarse engañar por los bombos y platillos con que se anuncia el magnífico estado de la economía mundial, en especial la de los EE.UU. Volcker planteó que los Estados Unidos “retrasan todas las soluciones necesarias en otros países…Las acciones que se han tomado hasta ahora no son suficientes para hacer que el déficit tienda a disminuir”. La fuerza de la economía, concluye Volcker, “no es una felicidad absoluta”.

Sin embargo, la gran ilusión que han creado todos los ideólogos capitalistas, incluyendo a Volcker, sobre este mundo nuclear con su producción robotizada, se logró gracias a que olvidaron que el trabajo enajenado es la base insustituible, la esencia y la forma

Verso una storia della critica del valore

Anselm Jappe  |  Nel 1991, cadde il Muro di Berlino e l'Unione Sovietica era sul punto di esalare l'ultimo respiro. L'euforia della vittoria si spandeva fra coloro che erano sempre stati, o almeno da qualche tempo, convinti che il libero mercato e la democrazia occidentale fosse l'ultima parola nella storia. Fra la sinistra radicale, inclusi coloro che non avevano mai nutrito alcuna illusione circa "il socialismo attualmente esistente", c'era molta costernazione. Era davvero impossibile superare il capitalismo? Era necessario limitarsi d'ora in poi a fare solo occasionali modeste riforme? In tale contesto, la comparsa di un libro scritto in tedesco, intitolato "Il crollo della modernizzazione: dalla caduta del socialismo da caserma alla crisi economica mondiale" (Kurz 1991) poteva non sembrare bizzarro. Non di meno, questo libro, pubblicato da una grande casa editrice, ebbe un sostanziale impatto su una recentemente "riunita" Germania. Fino ad allora, l'autore del libro, Robert Kurz (1943-2012), era conosciuto solo nei ristretti circoli marxisti per una sua piuttosto oscura rivista che di recente aveva cambiato il suo nome da "Marxistische Kritik" a "Krisis". Kurz sosteneva nel suo libro che, lungi dall'essere il segnale del trionfo finale del capitalismo occidentale, la caduta dell'Europa dell'Est era solo una tappa del crollo graduale dell'economia mondiale basata sulla merce, sul valore, sul lavoro astratto e sulla moneta.

El economista que ha conquistado EE UU | La élite cultural ha adoptado a Thomas Piketty como su nueva mascota

  • La tesis de Thomas Piketty, que tardó 15 años en amasar la gigantesca masa de datos que componen su libro, es que  la riqueza heredada siempre tendrá más valor que lo que un individuo pueda ganar en una vida. Que el capitalismo es, por lo tanto, incompatible con la democracia y con la justicia social.  La tendencia de todo rico es a hacerse todavía más rico porque el mercado le empuja inexorablemente y que esa ley inquebrantable arrastra a la sociedad hacia la oligarquía.
Begoña Gómez Urzaiz  |  Lo dijo la escritora Zadie Smith sobre La broma infinita de David Foster Wallace, el libro que todo estudiante de letras con serias aspiraciones de llegar a tener una vida sexual tenía que exponer en su habitación en los noventa. Pero bien podría haberlo escrito ayer mismo sobre El capital en el siglo XXI, la obra del economista francés Thomas Piketty, que tiene 700 páginas en su edición en inglés y 970 en la francesa. “Llevarlo debajo del brazo se ha convertido en la nueva herramienta de conexión social en ciertas latitudes de Manhattan” ha dicho The Guardian del libro, que se convirtió la semana pasada en el más vendido en Amazon y escala posiciones cada semana en la lista de best-sellers de The New York Times.

Y eso que Capital, como se le conoce por la tipografía de su edición estadounidense, que tiene un elegante diseño atemporal, no tiene nada de fácil ni en lo que dice ni en cómo lo dice. En esencia, la tesis de Piketty, que tardó 15 años en amasar la gigantesca masa de datos que componen su libro, es que en el actual sistema económico la riqueza heredada siempre tendrá más valor que lo que un individuo pueda ganar en una vida. Que el capitalismo es, por lo tanto, incompatible con la democracia y con la justicia social. Que los

5/5/14

La última biografía de Karl Marx

Luis Martínez Andrade  |  En 1907, el historiador italiano Benedetto Croce, bajo la frase lapidaria “Marx está realmente muerto para la humanidad”, intentó sepultar el pensamiento, la praxis y la genialidad del autor de El Capital. Sin embargo, siempre intempestivo, Marx regresaba de su tumba para ser partícipe en la toma del Palacio de Invierno, en la Larga Marcha al interior de China, en la Sierra Maestra de La Habana o en las luchas de liberación de la Nicaragua somocista, por mencionar algunos de los pasajes más significativos del siglo XX donde el filósofo de Tréveris era algo más que un “perro muerto”. No es fortuito que durante sus exequias, su cómplice de juergas, mecenas desinteresado y amigo entrañable, Federico Engels sentenciara: “Su nombre vivirá a través de los siglos, y con él su obra”. Francis Wheen no parece disentir de Engels (1999: 1, 382).

De ahí que Francis Wheen, escritor y periodista británico, nos presente una biografía de Carlos Marx compuesta de doce capítulos y tres anexos –destacando una partida de ajedrez con Gustav Neumann–. A través de una especie de bestiario, pues los capítulos se titulan The Little Wild Boar, The mouse in the Attic, The Magalosaurus, The Hungry Wolves, The Bulldogs and the Hyena, The Shaggy Dog, The Rogue Elephant o The Shaven Porcupine, el autor intenta detallar la vida de Marx.

Nuevamente sobre el materialismo de Marx y su actualidad

Karl Marx ✆ A.d. 
Juan Dal Maso  |  […]  El objetivo de… [mi artículo ‘Peter D. Thomas y la filosofía del marxismo] no era privilegiar el materialismo contra o sobre la praxis, sino introducir a algunas cuestiones planteadas por el libro de Peter D. Thomas The Gramscian Moment y señalar algunos lugares comunes que da por supuestos o menciona abiertamente (más abajo, más detalles al respecto). Creo que de entrada la interpretación que hace Federico sobre que plantear que la oposición de materialismo y praxis es estéril es como plantear que la cuestión filosófica da lo mismo, no tiene nada que ver con lo que plantea el [artículo]. Pero vayamos por partes. 

En primer lugar, creo que si bien la discusión entre "materialistas" y "praxiológicos" tuvo su importancia histórica, no es tan sencilla ni tan nítida como parece serlo para Federico [Manzone]. Por ejemplo, él menciona entre los ejemplos, a Antonio Labriola y la II Internacional, pero Labriola nunca consideró que sus elaboraciones fueran contra la II Internacional, sino contra los socialistas italianos que postulaban que el marxismo era afín con Spencer y Darwin (entendido éste último como una variedad de Spencer), los cuales a su vez eran una

La cuestión nacional según Otto Bauer | Notas críticas en torno a un clásico

Foto: Otto Bauer
(1881–1938)
Damián López  |  Resulta bastante corriente señalar el llamativo desfasaje existente entre la emergencia y expansión del nacionalismo y los Estados nacionales durante los siglos XIX y XX y el tardío desarrollo de teorías y estudios de caso que los analizaran en profundidad. Como es sabido, el boom sobre tales temas se produjo fundamentalmente a comienzos de los ’80, aunque aun antes pueden rastrearse algunos importantes antecedentes que, desde las más diversas corrientes de interpretación, y según el autor que se trate, fueron rescatados posteriormente en cuanto habrían anticipado elementos relevantes. Entre esta diversa bibliografía, que va de Ernest Renan a Karl Deutsch, algunas veces se incluyen los debates sobre la cuestión nacional dentro del marxismo, destacándose aquí por su cantidad y calidad la producción de importantes figuras de la Segunda Internacional (1889-1914) como Karl Kautsky, Rosa Luxemburg, Lenin, etc. Sin embargo, en este segundo caso se trata en general de investigaciones que se centran en el contexto específico de producción y en la discusión teórica al interior del marxismo; los libros de referencia sobre el nacionalismo, en tanto, normalmente otorgan poca relevancia teórica a aquellos aportes.

Aunque esta percepción sobre la inactualidad teórica de los acercamientos al problema nacional por parte de los miembros de la Segunda Internacional es materia de un arduo debate que no podemos presentar aquí por razones de espacio, puede decirse que en

4/5/14

Vicisitudes y nuevos estudios de ‘La ideología alemana’

Marcello Musto  [2008]  |  Los múltiples intentos de publicar las obras completas de Marx y Engels han visto florecer, a propósito de sus ediciones, algunos periódicos que tenían el objetivo de acompañar y promover los trabajos, además de ofrecer una contribución a la investigación. También este capítulo de la Marx Forschung (la investigación sobre Marx) se abre, como muchos otros, con los trabajos de David Borisovich Riazanov, curador de la primera edición histórico-crítica de la obra completa de Marx y Engels, la Marx Engels Gesamtausgabe (MEGA), sin duda, el más importante Marx Forscher del siglo XX. Gracias a su iniciativa, y bajo el cuidado del Instituto Marx y Engels de Moscú dirigido por el directamente, en el bienio 1926-27 aparecieron los dos volúmenes del Marx-Engels Archiv. El objetivo del proyecto, del cual, en principio, se había excluido cualquier referencia al debate político del momento, era proveer anticipos sobre los manuscritos de los dos pensadores para hacerlos accesibles a la crítica antes de la edición completa de la obra. Como es sabido, sobre la MEGA se descargo el hacha del estalinismo, responsable, además de muchos otros crímenes, de haber interrumpido la publicación de la obra de Marx.

A pesar de que han aparecido, desde 1956 a 1968 la Marx Engels Werke (MEW) y entre 1955 y 1966, en la Unión Soviética, la segunda K. Marks i F. Engelsa Sochinenia, durante los cuarenta años trascurridos desde la interrupción del primer intento de Gesamtausgabe en 1935 y la impresión de la segunda (cuyo primer volumen se remonta a 1975), en el campo “socialista” no hubo serias iniciativas editoriales semejantes. La única revista de este ciclo fue

3/5/14

El papel de la personalidad de Lenin en la revolución bolchevique

Lenin ✆ Nikolay Fechin 
Iñaki Gil de San Vicente  | El noventa aniversario de la revolución bolchevique facilita y exige a la vez un sinfín de investigaciones teóricas orientadas a la mejora de la praxis revolucionaria mundial. De entre las muchas cuestiones históricas que se han de rescatar de la mentira, ahora vamos a centrarnos en dos ellas: ¿debemos hablar de revolución rusa, de 1917, de octubre o de revolución bolchevique? Y ¿qué papel jugó la personalidad de Lenin en todo ello, o más aún, qué personalidad tenía Lenin? Sobre esta segunda parte disponemos de multitud de hagiografías stalinistas destinadas a borrar todo aquellos que contradecía directa y esencialmente al nuevo régimen burocrático, y que era prácticamente todo. También tenemos las innumerables mentiras burguesas al respecto. Pero de entre las muy contadas descripciones objetivas disponibles destaca la de Krúpskaya, su libro sobre su vida con Lenin, y especialmente la nota que vamos a usar en este breve texto. Hay que decir que la propia Krúpskaya ha sido rebajada, menospreciada y maltratada por las versiones burguesas y stalinistas, todas ellas patriarcales aunque en diverso grado, cuando realmente tanto el bolchevismo como las aportaciones innegable de Lenin al marxismo hubieran sido imposibles sin la titánica militancia integral de esta

El día en que Karl Marx se entrevistó con Felipe Varela

  • "Galopa en el horizonte, / tras muerte y polvaderal; / porque Felipe Varela / matando llega y se va." | José Ríos
  • "De Chile llegó Varela, / y vino a su Patria hermosa. / Aquí ha de morir peleando / por el Chacho Peñaloza." | Juan Alfonso Carrizo
Felipe Varela ✆ Octavio Calvo
José Pablo Feinmann  |  Cierta vez, para ser más preciso, el 10 de abril de 1867, Marx se encontró no lejos de un lugar conocido como El Pozo de Vargas, en la provincia de La Rioja_ con el caudillo catamarqueño Felipe Varela. Era mediodía. Un sol insumiso, luctuoso, hería la tierra y hacía del aire una carencia ardiente. Sin embargo, allí, la guerra era un destino a cumplir. En menos de una hora, Varela habría de lanzarse contra las tropas del santiagueño Taboada. Fue entonces cuando Karl Marx arribó al campamento y pidió hablar con el caudillo montonero.
                 
Entre alharacas, aspavientos, entre grandes gestos de asombro, se llegaron hasta la tienda de Varela, del coronel Felipe Varela, y le dijeron que de una galera polvorienta acababa de descender un hombre extraño, tan extraño, le dijeron, que era diferente a cuantos habían visto en su vida, porque tenía una levita negra y por eso parecía un doctor de Buenos Aires, pero tenía tanto pelo en la cabeza, tanta patilla, tanto bigote y tanta barba, que esa cabeza semejaba un bosque de pelo, motivo por el cual, dijeron,  si bien por la levita parece un doctor de Buenos Aires, por la cabeza parece el mismísimo general Juan Facundo Quiroga, Dios lo tenga en Su santa gloria, tras lo cual “Que venga” dijo Varela, y casi no fue necesario que lo dijera porque ya estaba ahí el