31/3/14

José Revueltas y el joven Marx | La filosofía de la enajenación

Karl Marx ✆ Arthur Kamst
Jorge Fuentes Morúa  |  José Revueltas fue influido por las ideas del joven Marx desde fines de la década de los años treinta. La filosofía marxiana desarrolló conceptos como alienación, cosificación y enajenación, páginas relevantes sobre estas cuestiones se encuentran en “Manuscritos económico-filosóficos de 1844″. Revueltas pudo leer este texto pues fue vertido al español por vez primera en la Ciudad de México en 1938. Por eso el joven militante Revueltas lo conoció, editado como “Economía política y filosofía”. A lo largo de la poligrafia revueltiana se advierte la problemática de la enajenación. En este texto se argumenta cuáles fueron los principales intereses que despertaron la atención del escritor mexicano y cómo se manifestaron en algunos textos de su mta poligrafia. Naturalmente es posible hacer un extenso estudio de la influencia filosófica de Marx en dicha poligrafia, sin embargo aquí sólo se mencionan cuestiones que al autor le llamaron la atención cuando releyó Economía política y filosofía en 1959, vinculada con remáricas desarrollada en sus escritos.

Revueltas leyó recurrentemente los escritos de Marx de la primera época, es decir del joven Marx, denominación que objetó el duranguense.’ Probablemente en 1959 volvió a buscar sustento teórico en la obra: C. Marx, Economía política y filosofía; esta

Modernidad y Ethos barroco en la filosofía de Bolívar Echeverría

Enrique Dussel  |   En primer lugar, Bolívar Echeverría (1941-2010) se ocupó (y fue el primer momento de su vida intelectual) de una muy creativa de la interpretación no dogmática de categorías esenciales de la crítica de la Economía Política realizada por K. Marx, cuestión que no abordaremos, sino en cuanto sea necesario, en este trabajo. En segundo lugar (siendo el tema abordado en un segundo momento de su vida, desde fines de la década del 80 del siglo XX), expuso una filosofía de la cultura, situada principalmente en América Latina, cuestión que trataremos en este corto ensayo.

Dentro de la filosofía de la cultura la visión que tiene de la modernidad y del ethos barroco son quizá los dos temas centrales abordados por el gran filósofo latinoamericano. La exposición de este ensayo lo dividiré en dos partes. En la primera, expondré resumidamente la posición de Echeverría; en la segunda, intentaré plantear algunas preguntas para abrir un debate dentro de la problemática actual latinoamericana que ha sido recientemente enriquecida por la problemática esbozada por el llamado “giro descolonizador” –cuyos prolegómenos deben situarse sin embargo desde finales de la década del 60 del siglo XX–.

Difusión y recepción del ‘Manifiesto’ en Italia desde 1889 a 1945

Marcello Musto  |  A causa de conflictos teóricos o de acontecimientos políticos, el interés por la obra de Marx jamás ha sido constante y, cuando se ha manifestado, conoció indiscutibles momentos de declinación. Desde la “crisis del marxismo” a la disolución de la Segunda Internacional, desde las discusiones sobre los límites de la teoría del plusvalor a las tragedias del comunismo soviético, las críticas a las ideas de Marx parecieron, en cada ocasión, superar definitivamente su horizonte conceptual. Siempre, sin embargo, hubo un “retorno Marx”.

Constantemente se desarrolló nuevamente la necesidad de referirse a sus obras que -a través de la crítica de la economía política, las formulaciones sobre la alienación o las brillantes páginas de los panfletos políticos- siguió ejerciendo una irresistible fascinación sobre seguidores y opositores. Y pese a que al finalizar el siglo se le decretó unánimemente en el olvido, desde hace algunos años a esta parte inesperadamente, Marx se ha vuelto a presentarse sobre el palco de la historia. En efecto, está en curso una verdadera recuperación del interés a su respecto y en los estantes de las bibliotecas de Europa, los Estados Unidos y el Japón sus escritos son desempolvados cada vez más frecuentemente.

30/3/14

El vino del león de Tréveris | La desfavorable política fiscal prusiana empobreció a viticultores del Mosela y Marx criticó al Gobierno

Una vista del valle del Mosela | La defensa de los viticultores de esta región por parte
del joven y brioso Karl Marx fue el anticipo de una brillante carrera revolucionaria
Luis M. Alonso  |  Una pincelada para empezar. Mosel es la región vinícola más antigua de Alemania y una de las clásicas referencias europeas. Las empinadas laderas de sus soleados valles fluviales están densamente plantadas con vides, más que en cualquier otro lugar del mundo. Los romanos empezaron a cultivar allí la vid dos milenios atrás. El Mosela y sus afluentes el Sarre y Ruwer fluyen a través de campos surcados por la Historia. Tréveris, la ciudad más antigua de Alemania, es la capital que ya lo fue del Imperio romano y residencia del emperador Constantino el Grande. Su hijo más famoso se llama Karl Marx y está enterrado en el cementerio londinense de Highgate, adonde unos amigos me llevaron en una ocasión a descorchar una botella de Riesling, de color oro y aromas de limón y rosas, con el fin de brindar junto a su tumba a propósito no sé de qué.

Esclavitud y capitalismo | La alargada sombra de las plantaciones esclavistas del XIX sobre la economía capitalista contemporánea

Walter Johnson  |  En marzo de 2013, los investigadores del University College de Londres hicieron pública una base de datos que describe con iluminador detalle uno de los mayores rescates públicos de la historia moderna. En 1833, Gran Bretaña pagó 20 millones de libras esterlinas para compensar a los 3000 propietarios esclavistas caribeños por la emancipación de sus esclavos. Los pagos representaban el 40% de todo el gasto público de ese año. La discusión sobre la base de datos en Gran Bretaña se centró en los receptores de esas reparaciones a los esclavistas, entre ellos los ancestros de George Orwell, Graham Greene y David Cameron.

Aparte de unos cuantos cientos de esclavistas del Distrito de Columbia, nadie en los EEUU recibió compensaciones por la pérdida de su propiedad humana. De acuerdo con Abraham Lincoln, al menos, el coste de la emancipación en los EEUU se pagó con sangre. En su Segundo Discurso Inaugural, Lincoln declaró temer que Dios deseara la continuación de la guerra “hasta que todas y cada una de las gotas de sangre arrancadas por el látigo hayan sido reparadas con otras tantas gotas arrancadas por la espada”. Ese pago, con sangre y con dinero del tesoro, del valor de los esclavos plantea una cuestión tan importante como frecuentemente desatendida: ¿cuál fue

Reflexiones metodológicas y políticas sobre ‘El capital en el siglo XXI’ y el concepto de ‘capital’

El economista francés Thomas Piketty acaba de publicar un voluminoso libro, Capital in the Twenty-First Century [El capital en el siglo XX I- Le Capital au XXIe. siècle] (Belknap Press, Harvard, 2014, 671 páginas), que ha atraído inmediatamente la atención del mundo académico y hasta del Financial Times. El libro es resultado de una gran investigación empírica fundada en la elaboración de inmensas bases de datos. Es también una crítica inclemente de la irrelevancia y necedad de la ciencia social académica que ha llegado a imperar en las últimas décadas (no sólo en la teoría económica). Y aspira a ser, asimismo, una crítica política radical del catastrófico e insostenible capitalismo de nuestro tiempo. El texto que reproducimos a continuación es una reseña crítica escrita por James Galbraith, autor él mismo de la que acaso sea la mejor investigación teórica y empírica de la relación entre financiarización, inestabilidad y desigualdad en el capitalismo de nuestro tiempo (Inequality and Instability). La interesante –e inclemente— crítica de Galbraith a Piketty es teórica (el concepto de "capital" de Piketty sería incauta e inadvertidamente

29/3/14

El dominio del dinero y las finanzas | Los escritos de Marx sobre las crisis bancarias son de lo más actual, parece que está hablando de hoy mismo

Karl Marx ✆ Xulio Formoso
Carlos Berzosa  |  La fase del capitalismo que se inicia a finales de la década de los ochenta del siglo pasado se caracteriza, entre otros rasgos, por la hegemonía de las finanzas. Este protagonismo que ha adquirido el mundo financiero ha supuesto aumento de la especulación y del endeudamiento, incremento del dinero que fluye a los paraísos fiscales, mayor número de fraudes y de delitos económicos, y una más elevada inestabilidad económica. Todo ello ha desembocado en el estallido de la crisis económica actual. 

El daño que este proceso está causando al progreso económico y social en la economía mundial es muy elevado, pues como consecuencia de lo que supone este dominio de las finanzas se concentra aún más la riqueza, al tiempo que aumenta la desigualdad, la pobreza no tiende a disminuir, y la inseguridad laboral se instala en las sociedades, no ya solamente en los países emergentes y subdesarrollados sino en los países ricos. Se deteriora la democracia como consecuencia de que las decisiones importantes que afectan a variables macroeconómicas, aunque no todas ellas, se toman fundamentalmente por los poderes financieros.

Esta fase tiene unos rasgos novedosos frente a otros periodos de la historia, pero, sin embargo, hay hechos que son comunes con

Sobre el socialismo del siglo XXI y el Poder Popular

Carlos Medina Gallego  |  Esta ponencia se centrará, en lo esencial, en el esbozo de unas tesis generales sobre lo que ha dado en denominarse El Socialismo del Siglo XXI y el concepto de Poder Popular como práctica de acumulación política en la construcción del proyecto socialista. Es el resultado del trabajo de investigación y reflexión permanente sobre los desarrollos programáticos y teóricos de distintas fuerzas políticas y sociales en Colombia y América Latina, de los procesos de construcción crítica de nuevos imaginarios políticos para la izquierda en el contexto de la posguerra fría, la globalización y el capitalismo neoliberal. Se busca en lo esencial aportar elementos para animar la discusión al respecto, tomando en consideración las particulares concepciones existentes en el marco de los procesos políticos continentales, buscando definir a la vez los rasgos esenciales de un modelo socialista propio. Para ello se formulan unas tesis generales que buscan dar razón a los aspectos más relevantes de la discusión existente al respecto.

28/3/14

El Partido Comunista de la Argentina ante la Segunda Guerra Mundial y la disolución de la Internacional Comunista [1939-1943]

Víctor Augusto Piemonte  |  La Unión Soviética se vio sumida en la Segunda Guerra Mundial a partir de la invasión alemana en su territorio, a partir de la ejecución de la Operación Barbarroja en junio de 1941. Esto sin duda alguna motivó la parálisis definitiva de la Internacional Comunista, a la que Stalin nunca había dado mayores créditos y que llevaba seis años sin celebrar sus congresos. 

De igual modo, la ruptura del tratado de no-agresión por parte del Tercer Reich, producida en vísperas de la celebración del X Congreso nacional del PCA, influyó en el rumbo que tomó este último en los años subsiguientes. En su congreso de 1941 el PCA volvió a contar con la participación de Victorio Codovilla y Rodolfo Ghioldi, de regreso en el país tras prolongados períodos de ausencia. La presencia de ambos fue crucial para la elaboración de los materiales que fueron tratados en dicha instancia y para la reestructuración de la dirección partidaria. Proponemos aquí, por lo tanto, que la expulsión de aquella tendencia intrapartidaria que fue denunciada por generar supuestas controversias redundó en una profundización todavía mayor de la ortodoxia stalinista en la praxis del PCA. Es por ello que este artículo recorre temporalmente los primeros años de contradicciones comunistas emergidas con motivo de la Segunda Guerra Mundial, pasando por la eliminación virtual de la IC en 1941 hasta llegar a su disolución formal definitiva dos años más tarde. La dependencia teórica que acompañó al PCA durante la mayor parte de su existencia, así como la autodestrucción del organismo que centralizaba el desarrollo de esta dinámica, conllevó al surgimiento de un período de intensa confusión que perjudicó el efecto de las tareas dirigidas a conquistar políticamente las masas. La recomposición de la dirección del

26/3/14

¿Quién es Karl Marx? | Informe para la policía prusiana sobre su exilio en Inglaterra

  • El informe fue  redactado entre 1852-1853 por un agente de la policía prusiana sobre Karl Marx, su familia y el ambiente en el cual vivían
Karl Marx & Jenny ✆ Angela Smets 
El jefe de este partido (de los comunistas) es Karl Marx; los jefes inmediatos son Friedrich Engels, que vive en Manchester y Freiligrath y Wolff (a) “Lupus” en Londres, Heine en París, Weydemeyer y Cluss en los Estados Unidos; Burgers y Daniels, están en Colonia (Köln) y Weerth, en Hamburgo. Pero la mente activa y creadora, la verdadera alma del partido es Marx; por lo que quiero informarle sobre su personalidad

Marx es de media estatura, tiene 34 años; pero a pesar de su edad, sus cabellos son ya grises [canosos]; tiene una corpulencia vigorosa; los rasgos del rostro recuerdan notablemente los de [Bertalan] Szemere [1]; tiene un color de piel oscuro [2]  y el cabello y la barba son muy negros; lleva la barba completa; sus ojos son grandes, fogosos y penetrantes, tiene algo de siniestro, de demoníaco. Sin embargo se nota en él, a primera vista, la mirada de un hombre de genio y de energía. Su superioridad intelectual ejercita una influencia irresistible en quienes lo circundan.

L’individuo è l’essere sociale | Marx & Vygotskij

  • Questo bel saggio di Felice Cimatti – incluso nel testo collettaneo Il transindividuale, appena uscito per Mimesis (pp. 253-271) – è dedicato a una teoria della mente che si avvale degli strumenti messi a punto da Marx e Vygotskij per mettere a fuoco i limiti e le aporie dell’individualismo cognitivo e del biologicismo delle neuroscienze
Karl Marx ✆ Etten Carvallo
1. «La coscienza è un rapporto sociale»                                                                                                    Felice Cimatti

L’animale non umano, per Marx, «è immediatamente una cosa sola con la sua attività vitale. Non si distingue da essa. È quella stessa [attività vitale]» Marx, Manoscritti economico-filosofici del 1844.

Prendiamo un esempio determinato, un castoro. Per esplicare la sua ‘attività vitale’, ad esempio il costruire dighe sul corso dei fiumi,un castoro si basa essenzialmente su abilità innate, abilità appunto che non deve imparare, che non sono fuori di lui.Essere un castoro significa appunto nascere con un insieme di aspettative e abilità innate. In questo senso se il costruire dighe è una attività che distingue il castoro dalle altre specie animali, se questa è la sua essenza animale, allora questa stessa essenza è presente in modo implicito dentro di lui già alla nascita: l’essenza del castoro è dentro il castoro, come un chilo di rigatoni sta dentro la scatola di cartone che lo contiene. Questo non signifi ca che non sia importante anche l’esperienza né che tutto il comportamento animale sia innato; il punto è che ciò che l’animale può imparare è vincolato in modo più o meno rigido dalla sua

25/3/14

A propósito de la problemática del Estado en El Capital

Karl Marx
✆ Alejandro Magallanes 
Georges Labica  |  La siguiente intervención está basada en una doble preocupación, o más bien, en dos cuestiones. Trabajos anteriores o conexos me han conducido en primer lugar a buscar lo que en ellos había de la cuestión del estado en El capital, raramente solicitado en este aspecto. (1) Se podía además preguntar a qué había llegado la reflexión de Marx sobre el estado, entre la Crítica del derecho político hegeliano (1843) y La Guerra civil en Francia (1871), teniendo en cuenta que una reflexión tal excedía un poco el campo del simple concepto de dictadura del proletariado. Me propongo, en consecuencia, considerar lo que hay del estado en El capital y, si ello es posible, sacar de esto algunas enseñanzas. He de precisar que no tengo de ningún modo la pretensión de redactar, en lugar de Marx, el capítulo ‘Estado’ de El Capital. Me limito a algunas sugerencias, de ninguna manera exhaustivas, que presento a discusión. Es a propósito, para respetar el carácter necesariamente explosivo de la problemática en El Capital, que he puesto cuidado en distinguir algunas secciones.

1. La Clase y el Estado

Cuando Marx, tratando de la acumulación primitiva,(2) muestra cómo está constituido el proletariado, se ve inducido a explicar que al

24/3/14

Ernest Mandel, autoemancipación de los trabajadores y democracia socialista

  • “Estamos profundamente convencidos de que el régimen capitalista ha entrado en declinación, que los nuevos progresos de bienestar material que realiza todavía de tiempo en tiempo son contrarrestados por un costo destructor cada vez más elevado. Estamos convencidos de que este régimen está desgarrado por contradicciones cada vez más múltiples e incontrolables, que periódicamente las amplias masas se rebelan contra este régimen con movimientos poderosos que podrían abrir la via del progreso si desembocaran en la victoria, y que el deber de los socialistas es asegurar esta victoria mediante una línea política adecuada. Si la ocasión se pierde, se acrecienta cada vez más el riesgo de que el régimen capitalista se hunda en catástrofes todavía más graves que las conocidas en el pasado.”  Ernest Mandel
Arturo Anguiano  |  Ernest Mandel es uno de los referentes fundamentales del marxismo crítico, cuyas contribuciones enlazan la teoría y la práctica política e incidieron en debates decisivos todavía vigentes. Economista de profesión, estudioso de las contradicciones y tendencias del capitalismo contemporáneo, este trabajo aborda sus aportes menos conocidos sobre cuestiones teórico-políticas como el Estado, los momentos de crisis general de las relaciones capitalistas y del orden social, los procesos y formas de organización, resistencia y emancipación de los oprimidos, desembocando en los problemas de la democracia y de la reorganización se las sociedades desde una perspectiva

22/3/14

‘PolyluxMarx’, un interesante manual pedagógico para la enseñanza de ‘El Capital’ de Karl Marx

Adrián Sotelo Valencia  |  Recientemente la Fundación Rosa Luxemburgo Stiftung dio a conocer un material educativo para la lectura y comprensión del Primer Volumen de El capital de Marx llamado PolyluxMarx. La presentación tuvo lugar en el Auditorio Lucio Mendieta y Núñez de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM el 12 de marzo de 2014, a cargo de Antonella Muzzupappa (una de las autoras), Stefan Gandler (que no asistió pero envío un material al que se le dio lectura), Torge Löding, director de la Oficina Regional en México de la Fundación Rosa Luxemburgo y como comentaristas Francisco Cerezo y   Adrián Sotelo, todos moderados por David Estraulino.

Como se expone en el Prefacio a la edición en español, "PolyluxMarx es una base de trabajo única, dado que expone la estructura argumentativa de El Capital (primer tomo) en forma de diapositivas y gráficas animadas" y más adelante agrega: "PolyluxMarx se dirige sobre todo a los facilitadores y facilitadoras; pero también a las y los estudiantes, trabajadores, activistas políticos y personas –jóvenes o adultos– con formación académica o sin ella, lo mismo que con conocimientos previos teóricos o sin ellos".

21/3/14

Ernest Mandel, una introducción para la juventud | El esfuerzo de un hombre por poner el marxismo al día

Pepe Gutiérrez Álvarez  |  Recuerdo que al final del acto que se efectuó allá en septiembre de 1995 en el Ateneo de Barcelona con ocasión del fallecimiento de Ernest Mandel, después de que interviniéramos  Miren Etxezarreta, Jaime Pastor y yo mismo, hubo una ronda de palabras bastante curiosa. Una detrás de otro, diversos representantes del trotskismo “auténtico” más otro que glosó el pensamiento insuperable de Amadeo Bordiga, fueron desgranando los “errores” del autor de El capitalismo tardío, cada uno de ellos con una seguridad pasmosa. Todos tenían un Ernest Mandel reducido a su medida y  en las que creían como si el pensamiento y la historia fuesen una cuestión de peso y de buenas balanzas.  Fueron tantos que desde la mesa decidimos espontáneamente hablar de otros termas que habían aparecido.

Han transcurrido casi dos décadas y la vida y la obra de Ernest Mandel (Fráncfort del Meno, Alemania, 5 de abril de 1923 – Bruselas, 20 de julio de 1995) sigue siendo indispensable, leída y estudiada en muchas partes mientras que el olvido se ha llevado a aquellos que habían encontrado un ABC desde el cual tener su propio eureka, su pensamiento correcto que no necesitaba de la investigación, del

20/3/14

El marxismo como ciencia | Desafíos históricos y desarrollo teórico

Karl Marx ✆ Sammlung Rauch
Michael Burawoy  |  Este artículo examina la pretensión del marxismo de ser una ciencia. La primera parte considera posibles modelos de ciencia y argumenta que el más coherente es la metodología de los programas científicos de investigación de Imre Lakatos. En esta concepción, el conocimiento científico crece a partir de un núcleo duro de postulados protegidos de la refutación por el desarrollo de una serie de teorías auxiliares. Tal programa de investigación es progresivo y no degenerativo si las teorías sucesivas son consistentes con el núcleo, explican anomalías y hacen predicciones, algunas de las cuales se cumplen. En la segunda parte argumento que, con algunas modificaciones, la historia del marxismo -desde Marx y Engels al marxismo alemán y ruso, y finalmente el marxismo occidental- se adecua al modelo de un programa progresivo de investigación. En la tercera parte sostengo que las desviaciones respecto del modelo, tales como el marxismo soviético, se deben a la ruptura de la interacción recíproca entre la heurística marxista y los desafíos históricos.

La sociología clásica sostenidamente subestimó la pretensión científica del marxismo (Hughes 1958, cap. 3). Weber, Durkheim, Pareto y más recientemente Parsons acusaron al marxismo de sustituir la razón científica por la pasión moral y la metafísica

19/3/14

‘Herr Vogt’, de Karl Marx

Herr Vogt est un livre de Karl Marx publié à Londres en décembre 1860, en allemand. L’existence même de ce texte est souvent ignorée. Il s’agit à l’origine d’un ouvrage polémique. Depuis la lecture d’un livre de Carl Vogt1 en 1859, Marx avait « la conviction absolue que Vogt était de connivence avec la propagande bonapartiste. »2 Cela ne sera établi avec certitude qu’une décennie plus tard, après la chute de Napoléon III et la découverte de documents – comme Mehring le signale ci-après. Vogt ayant calomnié Marx 3 par écrit, ce dernier entreprit avec Herr Vogt de répondre pour démontrer le caractère mensonger de ces allégations. Dans ce but, Marx sollicita de nombreuses personnes pouvant témoigner et rétablir les faits réels.

Mais dans sa réponse, Marx s’en prend également aux jugements politiques de Vogt : « Marx prend sous la loupe chacun des arguments de Vogt, en démontre la fausseté et l’inanité : il fait à son adversaire un cours d’histoire […] enfin il démolit la construction idyllique d’un Napoléon III « libérateur des nationalités ». 4

Karl Marx versus Carl Vogt | Política, teoría y acción

A fines de 1860 Marx publica un libro denominado Herr Vogt [1], el cual hasta el día de hoy es uno de sus trabajos menos conocidos. Tanto Engels mismo como Wolff [2] y Lasalle, de manera casi inmediatamente posterior a su publicación, han hecho comentarios elogiosos respecto de la calidad y fuerza de su “prueba interna” [3]contra Vogt, de lo “magnífico” [4] del libro, así como “una obra de arte del principio al fin” [5]. Pero por sobre todo, Engels lo considero “el mejor trabajo polémico que hayas escrito, es más simple en estilo que el Bonaparte [6] y más efectivo para lo que fue llamado” [7].

Sin embargo, algunos de sus biógrafos han calificado al libro como un “obstáculo” [8] y otros han mencionado su “importancia política” [9]. En ambos casos, separando un abstracto trabajo teórico o literario (según quien lo nombre) del supuesto trabajo práctico-político de una acción simplemente inmediata. Esta separación no parece evidente en el propio desarrollo de Marx. Por el contrario eso que se presenta como separado aparece en continuidad y unidad, siendo su eje la acción que produce el avance en la conciencia de las determinaciones presentes en cada momento de la acción inmediata.

Marx contra Vogt | Apuntes para una biografía intelectual de los años 1860-1861

Marcello Musto  |  A través del último volumen de la Marx-Engels Gesamtausgabe (MEGA2), accedemos a la publicación completa de la correspondencia de Karl Marx entre 1860-1861: un capítulo demasiado poco explorado de su biografía intelectual. Este período comprende la redacción del polémico escrito El señor Vogt, los esbozos de El capital, los artículos periodísticos para el New York Tribune y para el Die Presse, además de los estudios realizados a través de minuciosas lecturas, las vicisitudes de su salud y la incierta fortuna de su existencia, causada por la profunda miseria que lo oprimía.
Vicisitudes editoriales de las obras de Marx y Engels
A pesar de la enorme difusión de los escritos y de la amplia afirmación de sus teorías, Marx y Engels todavía carecen de una edición integral y científica de sus obras. La primera razón de esta paradoja se debe al carácter incompleto y fragmentario de la obra de Marx, de la cual, excluyendo los artículos periodísticos editados entre 1848 y 1862, los trabajos publicados fueron relativamente pocos si se los compara a todos los realizados solo parcialmente o a la imponente mole de investigaciones desarrolladas. Esto lo testimonió el

Al margen de Karl Marx

Karl Marx en México 
✆ Roland Beier
Esteban Garaiz  |  Podría no haber nacido Carlos Marx, que México tenía ya trazada su ruta para la construcción nacional. Nadie podrá negar la enorme aportación del filósofo y economista alemán en el estudio profundo de la acumulación capitalista y de la plusvalía empresarial. Pero desde la insurgencia el camino de la nación mexicana para consolidar la formación nacional mestiza estaba claramente establecido. Podría llamarse: proceso de desconquista.

En 1813, cinco años antes de que Marx naciera, el genio insurgente José María Morelos tenía establecido con nitidez que, al margen y al lado de la América anglosajona que surgía pujante al confrontarse con su metrópoli en 1812, era necesario aquí demoler las absurdas estructuras sociales del régimen colonial español que perpetuaban las abismales diferencias entre los descendientes de los conquistados y los sucesores de los conquistadores. Esa ruta tiene que continuar. Esa ruta ha sido traicionada desde hace 30 años por los gobiernos de los dos partidos que todavía conservan la mayoría legal.

“Que la esclavitud se proscriba para siempre y lo mismo la distinción de castas, quedando todos iguales”. Todavía hoy le falta a la Conapred mucha, mucha tarea por hacer. Decían también los Sentimientos de la Nación, que las nuevas leyes nacionales “moderen la

Mario Bunge, la ciencia y el marxismo osificado

Karl Marx ✆ Thierry Ehrmann 
Salvador López Arnal  |  'SinPermiso' ha publicado en su edición del domingo 16 de marzo un escrito -“La ciencia y las políticas del desarrollo”- de abril de 2013 de Mario Bunge [Ver también La Página de Omar Montilla], al que presenta como “el más importante e internacionalmente reconocido filósofo hispanoamericano del siglo XX. Físico y filósofo de saberes enciclopédicos y permanentemente comprometido con los valores del laicismo republicano, el socialismo democrático y los derechos humanos, es profesor del Departamento de Filosofía de la McGill University, Montreal”. 

Se trata del prólogo a la última edición del libro Ciencia y Desarrollo, en la editorial Laetoli probablemente si no ando muy errado. Como nos tiene últimamente acostumbrados, el profesor Bunge habla aquí un poco de todo, no da apenas referencias y escribe, si se me permite la simplificación, a golpes de reflexión, a partir de las ideas (muchas de ellas brillantes, así, por ejemplo, sus reflexiones sobre el mercado o sobre el papel de la investigación básica) que le van pasando a toda velocidad por la cabeza. Y desde luego con sus fijaciones de hace tiempo: Hegel, Heidegger y sus filósofos parisinos en lugares destacados.

El retorno de Marx

Karl Marx ✆ A.d.
Efrén Rivera Ramos  |  Un espíritu recorre el mundo intelectual contemporáneo: el recuerdo de Carlos Marx. Lo atestigua la aparición de numerosos trabajos recientes que examinan, desde perspectivas diversas, la vida y obra del pensador y revolucionario alemán. Se asoma también en las referencias a su nombre que aparecen, sin pretensión de ahondamiento, en los comentarios de analistas y ensayistas de todo tipo. Entre los libros más sobresalientes cabe mencionar la enjundiosa biografía publicada en el 2013 por Jonathan Sperber, profesor de Historia de la Universidad de Missouri. Su publicación llama la atención, entre otras cosas, porque la academia estadounidense nunca se ocupó de Marx con la profusión que se hizo en Europa, particularmente en Inglaterra, donde éste pasó la segunda mitad de su vida.

Sperber es especialista en historia europea del siglo diecinueve. De ahí que su mérito mayor sea analizar a Marx como lo que fue: un intelectual comprometido con las luchas sociales y políticas de su tiempo. Además de las contribuciones de Marx como filósofo y economista y su participación en el incipiente movimiento obrero de la época, el autor destaca su quehacer como periodista -por ejemplo, durante muchos años fue corresponsal europeo del periódico New York Tribune- así como su vida privada y familiar.

17/3/14

Teoría política marxista o teoría marxista de la política

Karl Marx ✆ Artonfix
Atilio A. Boron  |  La reflexión política marxiana debe, por derecho propio y legítimamente, ocupar un lugar destacadísimo en la historia de las ideas políticas y, más aún, constituirse en uno de los referentes doctrinarios primordiales para la imprescindible refundación de la filosofía política en nuestra época.

Huntington y Bobbio

La opinión más difundida considera a Marx como un economista político, tal vez como el “gran rebelde” entre los economistas políticos clásicos. Otros, sin embargo, lo consideran como un sociólogo, mientras que no pocos dirán que fue un historiador. Casi todos, además, coinciden en caracterizarlo como el más grande profeta de la revolución. Autores tan disímiles como Joseph Schumpeter y Raymond Aron, por ejemplo, señalan reiteradamente este carácter multifacético del fundador del materialismo histórico. En efecto, Marx incursionó en cada uno de estos campos, pero ¿cómo olvidar que primero y antes que nada fue un brillante filósofo político? Sin embargo, hubo que esperar que pasara poco más de un siglo de su muerte para que el nombre de Marx comenzara a resonar en los

Gramsci y la Sociedad | De la crítica de la sociología marxista a la ciencia de la política

Antonio Gramsci ✆ Piero Ciuffo
Fabio Frosini  |  En los Cuadernos de la cárcel la crítica de la sociología conduce a la elaboración de una “ciencia de la política”. En este ensayo se muestra cómo esa crítica —que nace como intervención política en el contexto del comunismo de la Tercera Internacional— se entrelaza con los nudos cruciales de la reflexión de Gramsci, como la relación entre teoría y política (y el estatus de la teoría) y entre filosofía e ideología, y los conceptos de necesidad histórica, ley y ciencia. Se muestra cómo el resultado de la investigación consiste, para Gramsci, no tanto en el rechazo de la idea de una legalidad social, sino en la redefinición de la “ley” social e histórica en términos de “regularidad”, noción en la cual se sintetizan voluntad política y necesidad económica.

Cuestiones de método
a Nicola Badaloni, in memoriam
En este escrito quiero examinar algunos aspectos del legado manuscrito de Antonio Gramsci. Como es de sobra conocido, tras su encarcelamiento (8 noviembre 1926) con una condena a 20 años, 4 meses y 5 días de prisión (4 de junio de 1928) por los

16/3/14

A Marx no le alcanzó el tiempo

Karl Marx ✆ Clara Bow
Clodovaldo Hernández  |  Karl Marx ha dado de qué hablar en todo el planeta durante siglo y medio y la controversia no da señales de detenerse. Su apellido con el sufijo ismo se convirtió en una de las grandes tendencias filosóficas y, a la vez, de los mayores movimientos políticos de la historia. Su imagen de león (frondosas melena y barba enmarcando un rostro adusto) es un ícono de la civilización. Sus obras, principalmente El capital, La ideología alemana y el Manifiesto comunista, son bibliografía esencial para los estudiosos de la historia, la filosofía, la economía, la política y ramas afines.

Marx fue un hombre del siglo XIX. Nació el 5 de mayo de 1818 en Tréveris, ciudad que era parte de Prusia Occidental y hoy lo es de Alemania, y falleció en Londres el 14 de marzo de 1883. El tiempo vital no le alcanzó para saber cómo sería un gobierno de corte marxista, salvo, tal vez, la brevísima experiencia de la Comuna de París. Las revoluciones que han llevado su apellido llegaron mucho después, ya en el siglo XX. La historia personal de Marx, como suele suceder con las grandes figuras, está llena de enigmas y controversias. Casi todos los biógrafos aseguran que fue el primero de la infinita lista de economistas marxistas sin dinero. No es que haya nacido pobre, pues venía de una familia judía de clase media y tuvo la oportunidad de estudiar en varias importantes

El primer Partido Comunista de Cuba y la revolución de 1930

Blas Roca, en el balcón de la sede nacional del Partido Comunista,
entonces denominado Partido Socialista Popular
Julio César Guanche  |  El primer Partido Comunista de Cuba (PC), fundado en agosto de 1925, tuvo una relación difícil con la revolución que en la isla es conocida como “del 30” o del “33”. El PC contribuyó de forma esencial a la configuración de la “situación revolucionaria” que acabó con el régimen de Gerardo Machado en 1933. Esa agrupación contaba con una gran acción obrera, que dirigió y fraguó en medida significativa, y con una tradición extraordinaria de pensamiento, con figuras como Julio Antonio Mella y Rubén Martínez Villena.

No obstante, ya en la cima de la crisis de 1933 no comprendió la situación gestada, protagonizó el “error de agosto” (pactar con Machado el fin de la huelga general), y combatió un resultado directo de aquella revolución: la presencia en el Gobierno Provisional del ala revolucionaria representada por Antonio Guiteras. La táctica posterior del PC estuvo marcada por la recomendación de la Internacional Comunista, dada en noviembre de 1934, de revisar la posición ante Guiteras y por la nueva política “de

14/3/14

Marx, historiador de la praxis

  • “La única ‘ciencia’ que reconocemos, por consiguiente, es lo que llamamos la ciencia histórica” | Karl Marx & Friedrich Engels, La Ideología Alemana
Eduardo Grüner  |  El texto Las luchas de clases en Francia es, qué duda cabe, un estudio histórico (o, si se quiere, históricopolítico). Como lo son esos otros textos que le están inevitablemente asociados: cosas como El XVIII Brumario de Luis Bonaparte o La Guerra Civil en Francia, etcétera. En este caso, se trata de un texto que unifica una serie de artículos publicados durante 1850 en la Neue Reinische Zeitung. En ellos, Marx emprende su análisis de la revolución de 1848, con la que Francia inaugura el gran movimiento de las revoluciones nacionaldemocráticas (pero en las cuales el joven proletariado tiene ya un papel de primer orden) que estallan a lo largo de toda Europa. En la propia Francia, como es sabido, el movimiento culmina, momentáneamente, con la coronación imperial de Luis Bonaparte –el sobrino de Napoleón– mediante un grotesco coup d’etat.

Por supuesto, Marx no se conforma con registrar este final abierto, producto de la componenda de unas clases dominantes que –como lo dirá célebremente en El XVIII Brumario– son incapaces de elegir entre un fin terrorífico y un terror sin fin. El “terror”, claro está, ese terror que sólo puede causar el fantasma sobrevolando Europa al que el propio Marx había aludido poco antes, es el motivo

Dios, la Moral y la Religión desde una óptica marxista – I & II

  • “La Religión es el suspiro de los oprimidos, el corazón de los descorazonados, el espíritu de los abatidos. La Religión es el opio del pueblo” | Marx
Karl Marx ✆ Chris Haberman
Rafael Silva  |  En muchos de los artículos de [mi] Blog, hemos abordado el tema de la Religión y de la moral desde un punto de vista crítico, pero sin entrar a fondo en nuestra opinión, en nuestra creencia, desde la izquierda, esto es, desde la filosofía marxista. Nos hemos limitado a exponer o a criticar ciertos aspectos que no compartimos en cuanto a la manifestación de la Iglesia Católica en nuestra sociedad, pero sin abordar a fondo nuestros propios pensamientos al respecto. Sobre todo, hemos insistido en la necesidad de implantar un verdadero Estado laico en nuestro país, y hemos criticado la visión estrecha e hipócrita de la jerarquía eclesiástica ante algunos problemas sociales que nos acucian. En el presente artículo, el primero de una serie de dos, por fin, vamos a exponer nuestra idea de la moral y de la religión desde el punto de vista de la lógica marxista.

Comenzaremos por lo más general, como es la moral. La moral, tanto pública o social como privada, es un producto del Hombre, a lo largo de las diferentes civilizaciones que históricamente se fueron desarrollando. No es por tanto un mandamiento divino, un mandamiento sobrenatural, que nos venga dado desde una instancia superior. Por tanto, mientras exista el ser humano existirá una moral, cualquier tipo de moral. Y la moral humana va evolucionando. El tiempo y las diferentes culturas van forjando

13/3/14

Diez respuestas sobre Marx y los marxismos

Karl Marx ✆ Ricky
Francisco Fernández Buey

1. ¿Se puede establecer una línea de separación tajante entre la obra de Marx y los ismos posteriores?

No solo se puede establecer una línea de separación (dejemos a un lado lo de “tajante”) entre la obra de Marx y los marxismos posteriores, sino que se debe. Es la única forma de estudiar en serio a Marx: ir a sus textos y contextualizarlos. Lo mismo que se hace cuando se quiere saber lo que escribió o hizo cualquier otro fundador (o pretendido fundador) de cualquiera de los ismos que figuran en el diccionario, desde Jesús de Nazaret a J.S. Mill y desde Malthus a Lenin o a Mao (por hablar solo de ismos culturalmente consolidados). En el caso de la relación entre Marx y el marxismo, hay tres razones más para establecer un línea de separación. Primera: que Marx se quejó explícitamente en vida de lo que entonces empezaba a navegar con el nombre de marxismo. Segunda: que Marx criticó explícitamente varias tendencias que, ya mientras él vivía, se llamaban “marxistas” (a los marxistas académicos rusos, por ejemplo; a ciertos marxistas alemanes y franceses, etc.).  Tercera: que desde finales del siglo XIX ha habido varios

12/3/14

Una mirada marxista a la crisis de la vida urbana en Chile

  • Para Marx el fetichismo era una de las grandes amenazas del sistema capitalista. El hecho que en los últimos años el paseo de muchas familias se haya desplazado desde las plazas públicas hacia los shopping malls habla de un importante triunfo para el neoliberalismo y la ciudad como herramienta de generación de lucro. La gente prefiere los espacios de consumo masivo antes que los de encuentro social. 
Francisco Vergara Perucich  |  Durante años en nuestro país se demonizó al marxismo. Esta línea intelectual llegó a ser vinculada con conductas impropias para una sociedad que se decía moderna. Si bien es cierto que muchos eventos violentos se desencadenaron enarbolando la bandera de Marx, también es cierto que muchos de los problemas que vive la sociedad actual fueron anticipados por él en sus textos. La crisis de representación política actual está haciendo eco en muchos lugares del mundo y es en la ciudad donde se manifiestan estas discrepancias. Mediante estos breves apuntes pretendo contribuir a los esfuerzos de quienes pensamos que el estudio del marxismo es un insumo ideológico

Marx e Keynes, per non banalizzare le forme dei conflitti di clase

  • Può chi si schiera a favore della classe lavoratrice determinare un corto circuito tale da ostacolare lo stesso processo di emancipazione per cui si batte? Purtroppo sì. Come ripete insistentemente Marx, prendendosela con le lotte fallimentari dei suoi contemporanei, una cosa è essere depositari della volontà di cambiare le cose, un’altra è aver sviluppato la capacità di farlo.
Giovanni Mazzetti   |  Nel corso del ristagno quarantennale che stiamo attraversando il movimento ha ignorato questa differenza essenziale, commettendo un errore del tutto analogo a quello dei precedenti rivolgimenti storici. Marx definisce questo errore come un processo di “naturalizzazione” della propria condizione e dei propri bisogni. E’ evidente, infatti, che se nei bisogni che si cerca di soddisfare non c’è alcun problema, e cioè se le condizioni e il significato della loro soddisfazione sono immediatamente intelligibili, la volontà così com’è appare senz’altro un forza adeguata al perseguimento dello scopo. Uno sa quello che vuole e come può ottenerlo, cosicché tutto si riduce ad un “fare” corrispondente, e se le cose non vengono fatte ciò accade per la mancanza di “una volontà politica” di agire. Se invece lo stesso prender corpo del bisogno e le implicazioni della sua eventuale soddisfazione non sono immediatamente trasparenti, perché conseguenza di

11/3/14

Karl Marx explica a Ludwig Kuelmann su actitud hacia Ferdinand Lassalle

Karl Marx ✆ Wiaz 
Londres, 23 de febrero de 1865
Estimado amigo: He recibido ayer su carta, que me ha interesado vivamente, y respondo a sus diferentes puntos.. Ante todo, permítame explicarle en breve mi actitud hacia Lassalle. Durante su agitación, nuestras relaciones fueron suspendidas:
1) a causa de sus impertinentes fanfarronadas, unidas al más desvergonzado plagio de obras mías y  de otros autores;
2) porque yo condené su táctica política;
3) porque aquí en Londres, le expliqué y demostré con todo detalle, antes de que iniciase su agitación, que era un absurdo creer que el «Estado prusiano» podía ejercer una acción socialista directa.

Internacionalismo decolonial, antirracismo y anticapitalismo

Sadri Khiari  |  Habría mucho que decir (que apreciar y criticar) del internacionalismo tal como lo sintió durante el siglo pasado el movimiento obrero y sobre todo sus tendencias más radicales. Ideal generoso de emancipación humana, conoció momentos gloriosos de los que me resulta difícil hablar sin emocionarme. Los dos ejemplos que se me ocurren inmediatamente son el extraordinario movimiento de solidaridad suscitado por la revolución española y, como es evidente, puesto que me concierne directamente, el apoyo que muchos movimientos internacionalistas, comunistas o anarquistas dieron a las luchas anticoloniales.
Sadri Khiari

Podría mencionar otros muchos ejemplos. Resulta que un amigo me envió hace poco un texto corto de Trotsky que data de mayo de 1938 y que me moría de ganas de compartir sin encontrar una ocasión para hacerlo. Esta conferencia me la ha proporcionado. Es este, magnífico:  «Supongamos que en la colonia francesa de Argelia estalla mañana una rebelión bajo el estandarte de la independencia nacional y que el gobierno italiano, movido por sus propios intereses imperialistas, entrega armas a los insurgentes. ¿Cómo se deberían comportar en este caso los obreros italianos? He puesto deliberadamente el ejemplo de una revuelta contra un imperialismo democrático y de una injerencia a favor de rebeldes de un imperialismo fascista. ¿Deben impedir los obreros italianos el envío de un barco con armas a los argelinos? Supongamos que un izquierdista cualquiera responde afirmativamente a esta pregunta. Todo

10/3/14

Clara Zetkin y el origen del 8 de marzo

Foto: Clara Zetkin
Jean-François Cabral  |  8 de marzo 1911: el primer día internacional por los derechos de las mujeres es un éxito, sobre todo en Alemania, donde solo en Berlín tienen lugar más de cuarenta reuniones y eventos. Según Clara Zetkin, que fue la instigadora y quien hizo adoptar la celebración a la Segunda Internacional un año antes, aquella jornada fue "el movimiento de protesta más masivo que se ha conocido a favor de la emancipación de la mujer" [1]. Sin embargo, la tarea no fue fácil. Militante del Partido Socialdemócrata de Alemania en 1881, Clara Zetkin dirige la revista de las mujeres socialistas Gleichheit ("Igualdad"), que alcanzó con dificultad los 4.000 ejemplares a principios de siglo XX, desde 1891 hasta 1916. Sin embargo, la circulación creció hasta los 28.000 ejemplares en 1905 y a 125.000 en 1914.

Secretaria Internacional de las Mujeres Socialistas de la Segunda Internacional, Clara Zetkin participa en todos los combates de su ala izquierda, junto a Rosa Luxemburgo. Miembro fundadora del Partido Comunista de Alemania (KPD) en enero de 1919, escapó a la masacre y continúa la lucha desde el sur de Alemania antes de ponerse al frente en Moscú de la secretaría de la mujer de la Tercera Internacional. Elegida diputada del Reichstag como comunista sin interrupción hasta 1933, asistió a la toma del poder

9/3/14

Actualidad de Rosa Luxemburgo, una economista muy política

Rosa Luxemburgo habla en un acto político
Michael Krätke  |  ¡Así la conocéis! Fue una gran oradora, intervenía con discursos y arengas en las campañas políticas del movimiento socialdemócrata. Fue una celebérrima y temida polemista. Y fue una periodista tan famosa como formidable.
Primera sorpresa: Rosa Luxemburgo fue una economista (¡y una economista muy política!) Estudió ciencia económica en la Universidad de Zúrich, en donde obtuvo su doctorado en economía en 1897. Su tesis doctoral fue sobre un tema empírico, pero políticamente comprometido: las consecuencias del desarrollo industrial de Polonia dentro del Imperio Ruso
Segunda sorpresa: Profesora en la Escuela del Partido Socialdemócrata en Berlín. Rosa Luxemburgo enseñó economía política e historia económica (desde 1907 hasta 1914). Así pues –otra sorpresa—, fue profesora también, y una excelente profesora.
Tercera sorpresa: Rosa Luxemburgo escribió un voluminoso tratado de economía política (marxista). Escribió su opus magnum sobre problemas teóricos de economía política, un libro publicado hace ahora 100 años (La acumulación de capital, Berlín, 1913) en el que se planteaba la siguiente cuestión: ¿cómo funciona la acumulación de capital (el crecimiento y el cambio económicos)? ¿Cómo funciona a escala nacional e internacional, a escala mundial? Hay que poder responder a esa pregunta si se quiere entender/explicar el fenómeno del “imperialismo”.

Dialéctica e Historia | El Marxismo de Walter Benjamin

Walter Benjamin
✆ Maira Kalman
 
Ariane Díaz  |  Es sobre todo a partir de los ‘80 que los escritos de Benjamin son editados en Argentina, comienzan a pulular por las aulas universitarias y se convierten en objeto de intervenciones variadas en distintos coloquios y publicaciones 1. En 1992 un Simposio internacional dedicado al crítico con sede en Buenos Aires tuvo ponencias para todos los gustos. En el libro publicado Sobre Walter Benjamin. Vanguardias, historia, estética y literatura. Una visión latinoamericana, que reúne varias de las intervenciones allí realizadas y cuyo título da cuenta de la amplitud de temas tratados, resaltan dos ejes: por un lado, quienes toman a Benjamin como antecedente del posestructuralismo y hacen base en el lenguaje, sobre todo en el texto “Sobre el lenguaje en general y sobre el lenguaje de los hombres” de 1916, y por el otro, quienes se centran en su concepción de la historia, basándose sobre todo en sus tesis “Sobre el concepto de la historia” de 1940, su último texto.

El furor no parece haber retrocedido en los ’90 y 2000: desde programas de materias y seminarios universitarios, pasando por nuevos coloquios, los intelectuales de las más variadas posiciones políticas han escrito sobre él 2. Benjamin, al igual que otros pensadores del marxismo occidental 3y en buena medida igual que lo fuera Gramsci en los ‘60/‘70, es tomado por buena parte de la intelectualidad nacional como contrafigura del liberalismo tradicional por su marxismo, pero también del “marxismo clásico”

7/3/14

Marx y el espejo de la producción

Jean Baudrillard
✆ Guillem Cifré
Jean Baudrillard  |  Un espectro recorre lo imaginario revoluciona­rio: la fantasía de la producción, que alimenta por doquier un desenfrenado romanticismo de la pro­ductividad. El pensamiento crítico del modo de pro­ducción no afecta al principio de la producción. En su totalidad, los conceptos que en él se articulan sólo describen la genealogía, dialéctica e histórica, de los contenidos de producción, y dejan intacta la producción como forma. Esta misma forma resurge idealizada tras la crítica del modo de producción capitalista. En efecto, dicha crítica no hace más que reforzar, por un curioso contagio, el discurso revolucionario en términos de productividad: de la liberación de las fuerzas productivas a la “productividad textual” ilimitada de Tel Quel, hasta la productividad maquinística fabril del inconsciente en Deleuze (y, claro está, el “trabajo” del inconsciente), ninguna revolución podría colocarse bajo otro signo que aquél. La consigna general es la de un Eros productivo; riqueza social o lenguaje, sentido o valor, signo o fantasía, nada hay que no esté “producido” según un “trabajo”.

Si ésta es la verdad del capital y la economía política, la revolución se hace cargo de ella en su integridad: será en nombre de una productividad auténtica y radical que subvertiremos el sistema de producción capitalista, será en nombre de una hiperproductividad desalienada, de un hiperespacio productivo que aboliremos la ley capitalista del va­lor. El capital desarrolla

Adolfo Sánchez Vázquez y los manuscritos de 1844

  • “Un ‘elogio’ a un pensador no consiste en concordar con él sino en poder hablar con él y con él discutir” | Ramón Xirau
Adolfo Sánchez Vázquez ✆  David Padilla
Jorge Veraza  |  Con orgullo hago homenaje a Adolfo Sánchez Vázquez, hoy, al lado de ustedes. Y para no crear malentendidos por dejar en suspenso mi punto de vista desde el cual hago incluso la semblanza de nuestro autor, comienzo diciendo coloquialmente lo que ya argumentaré conceptualmente: que los “Manuscritos de París” —según los veo— tienen menos imperfecciones de las que él dice. Y más aún, que según lo que entiendo de la Filosofía de la praxis de Sánchez Vázquez, me sorprenden las deficiencias esenciales que él atribuye al texto de Marx de 1844. De hecho, me sorprendió este contraste desde que leí —por vez primera— en 1972 su libro, después de que a fines de 1967 leyera yo el juvenil texto de Marx.

Los “Manuscritos de París”, el radical texto marxiano de crítica a la autoalienación del hombre, sirve de piedra de toque a Adolfo Sánchez Vázquez desde mediados de los cincuentas para ajustar cuentas con el stalinismo, avanzando luego—

6/3/14

Questões filosóficas decorrentes das traduções das Teses sobre Feuerbach

Ludwig Feuerbach
✆ Nayer
Sílvio César Moral Marques  |  A publicação das obras de Marx sempre gerou controvérsias: por um lado as dificuldades advindas de sua caligrafia que alimentavam dúvidas quanto às palavras grafadas, por outro as ingerências em seus escritos com acréscimos e glosas realizadas, muitas vezes, para atender aos anseios ideológicos de seus editores e patrocinadores de suas ideias. Algumas tentativas foram realizadas para a edição das obras de Marx-Engels: a primeira se iniciou com Riazinov em 1927 e se encerrou em 1935 com 40 volumes previstos, dos quais somente 12 foram publicados (também conhecida por Marx-Engels Gesamtausgabe – ou MEGA 1); a seguir ocorrem as edições da Marx-Engels Werke editado na Alemanha Oriental; a partir dos anos 1970 inicia-se a edição de outra Gesamtausgabe (MEGA 2), agora com um aparato histórico-crítico e com previsão de publicação de 164 volumes. Em 1990 ocorre a mudança da editora Karl Dietz Verlag para a editora Akademie Verlag, com novos critérios editoriais. Seguindo as novas diretrizes, entre as quais a transcrição integral dos textos, a edição é reduzida para 114 volumes, dos quais 52 já se encontram publicados (40 pela Karl Dietz Verlag e 12 pela Akademie Verlag).

As Teses sobre Feuerbach foram escritas, ao que tudo indica, no mês de março de 1845 na cidade de Bruxelas num livro de notas (o primeiro de uma série de vinte cadernos que cobrem o período de 1844 a 1881), anotações estas que se referem a apontamentos pessoais,

Marx y la ciencia de los comportamientos políticos

Karl Marx ✆ Rob Spencer 
Thalía Fung Riverón  |  1. El pensamiento totalizador de Karl Marx no impidió que se acercara a la esfera de los comportamientos humanos, por el contrario, en sus obras histórico-políticas como “El 18 de Brumario de Luis Bonaparte”, “Las luchas de clases en Francia de 1848-1850”, “La guerra civil en Francia” trata las conductas de las macrogrupos, microgrupos y dirigentes, lo cual se mantiene en su obra cumbre “El Capital” ,donde no desdeña el análisis del comportamiento inclusive de individuos; pero es el discurso de la lógica de las totalidades y las mediaciones de alto nivel de generalidad el que caracteriza su expresión, lo cual lo peculiariza como filósofo, sin minusvalorar su fin político y económico.

2. No obstante, la relación hombre en tanto conciencia-naturaleza, sociedad-naturaleza, no son el comienzo de la famosa inversión metodológica que cualifica el materialismo filosófico de Carlos Marx. Es precisamente en el campo