30/4/15

Vigencia de José Carlos Mariátegui

“El verdadero pecado, acaso el pecado contra el Espíritu Santo, que no tiene remisión, es el pecado de herejía, el de pensar por cuenta propia” | Miguel de Unamuno

Miguel Mazzeo   |   José Carlos Mariátegui, el “Amauta”, suele ser considerado como el fundador del socialismo no gregario, no imitativo y más legítimo de Nuestra América. En efecto, el socialismo de Mariátegui se caracterizó por una inusual capacidad para contener, articular y superar positivamente otras tradiciones emancipatorias de Nuestra América, como el nacionalismo revolucionario, el antiimperialismo, el agrarismo y el indigenismo radical y para prefigurar otras, como el guevarismo, la Teología de la Liberación y la Teoría de la dependencia.

Lo que queremos demostrar, más allá de constatar “puntos flacos”, es que el socialismo de Mariátegui, en algunos aspectos más allá del propio Mariátegui, se fue constituyendo en un extenso campo, una especie de encrucijada teórica que hizo y hace posible un diálogo fructífero entre diversas tradiciones emancipatorias.

Mariátegui y el marxismo Latinoamericano

José Carlos Mariátegui
✆ Luis Cornejo Arenas
 “El socialismo no es, ciertamente, una doctrina indoamericana. Pero ninguna doctrina, ningún sistema contemporáneo lo es ni puede serlo. Y el socialismo, aunque haya nacido en Europa, como el capitalismo, no es tampoco específico ni particularmente europeo. Es un movimiento mundial, al cual no se sustrae ninguno de los países que se mueven dentro de la órbita de la civilización occidental. Esta civilización conduce, con una fuerza y unos medios de que ninguna civilización dispuso, a la universalidad. Indoamérica en este orden mundial, puede y debe tener individualidad y estilo; pero no una cultura ni un sino particulares… No queremos, ciertamente, que el socialismo sea en América calco y copia. Debe ser creación heroica. Tenemos que dar vida, con nuestra propia realidad, en nuestro propio lenguaje, al socialismo indoamericano.”  |  Mariátegui: “Aniversario y balance”, 1928

Fernando Dantés   |    El pasado 16 de abril se cumplieron 85 años de la muerte de José Carlos Mariátegui, uno de los pioneros del marxismo continental. El aniversario no es una mala excusa para hacer un repaso de su biografía, sus aportes y su lugar en la historia del socialismo revolucionario. Lamentablemente, hay relativamente pocos estudios acerca de las obras de Mariátegui dentro del marxismo. Lo que sí abundan son los “estudios” acerca de su “actualidad” entre los “socialistas” y “marxistas latinoamericanos” que pretenden utilizar al peruano contra él mismo. No hay una sola comilla de sobra en la oración precedente. Pues quienes se han arrogado por años la “reivindicación” de Mariátegui se han dedicado a mutilar sádicamente su pensamiento.

26/4/15

El imperio de los robots en Stiglitz y en Marx

Branko Milanovic   |   Siempre es instructivo hablar con Joe Stiglitz. En una conversación que tuvimos en París, luego de su charla en la Conferencia INET [The Institute for New Economic Thinking], me observó que la elasticidad de la sustitución entre capital y trabajo mayor que 1 –un supuesto habitual en el libro de Piketty El capital en el siglo XXI— combinada con un progreso tecnológico que no cayera como maná del cielo, sino que se desarrollara en respuesta a los precios de los factores, traería consigo un proceso explosivo que sólo podría terminar con un capital en posesión de todo el ingreso neto de un país. ¿Cómo?

Supóngase que tenemos un tipo de interés dado, r (de un 5%, pongamos por caso, como a menudo supone Piketty), y un salario dado, w. Supóngase que con esa proporción de los precios de los factores resulta rentable invertir en procesos más intensivos en capital (en procesos, esto es, que reducen el coste por unidad del producto). Así, los capitalistas reemplazarán trabajo con capital y las proporciones C/T y C/producto crecerán. Puesto que la sustitución de T por C es mayor que 1, r sólo decrecerá ligeramente, mientras que los salarios (w) crecerán sólo ligeramente. Aun cuando los precios de los factores, siendo rígidos, no variarán mucho, tendrían que seguir moviéndose ligeramente en punto a hacer aún más atractivos los procesos de intensificación de capital. De modo que se diera una nueva ronda de acrecida inversión en capital, la cual, de nuevo, haría crecer las proporciones C/T y C/producto con sólo unos mínimos efectos en los precios.

25/4/15

Karl Marx, Arthur Rimbaud y la Comuna de París

Arthur Rimbaud ✆ Manuel Jular 
Fernando Rendón   |   En un poema del cubano Luis Rogelio Nogueras (Wichy), se nos revela un hipotético encuentro entre Carlos Marx y Arthur Rimbaud en un café de París. No obstante pudo haber sido en Londres, en 1872, en las reuniones comuneras del Soho, o en la espaciosa sala de lectura de la biblioteca del Museo Británico, donde ambos leían por los mismos días tal vez los mismos libros, en los meses posteriores a la derrota de la Comuna de París, cuando los dos grandes hombres (revolucionarios y poetas) se cruzaron sin haberse saludado ni reconocido en la dimensión de su grandeza. Se explica, quizá, porque Rimbaud tenía solo 18 años y Marx ya 54. Rimbaud y Marx se encontraron, en cambio, en muchas de las líneas fundamentales del pensamiento y de la escritura sobre la realidad opresora de su época: monstruosa máquina de guerra del capital contra el trabajo. Ambos reclamaron, como respuesta al terror burgués, hacer realidad dos llamados urgentes: transformar el mundo y cambiar la vida. Al programa revolucionario, fruto de la experiencia y la sabia reflexión sobre la lucha del pueblo durante siglos, se añadía la pulsión de la primavera humana en el mundo y la escritura febril y visionaria del amor insurrecto capaz de transformarlo todo.

22/4/15

Kant & Marx: el problema de las colonias

Karl Marx
✆ Rajasekar Alamanda
Oscar Cubo Ugarte   |   En este trabajo se analiza la relación que guarda la filosofía del derecho de I. Kant y el pensamiento de K. Marx, sobre todo, en lo concerniente a la «Doctrina del Derecho» elaborada por I. Kant en la Metafísica de las Costumbres. Pretendemos mostrar que la exposición de la «Doctrina del Derecho» lejos de ser el fruto de un pensamiento burgués, como se ha venido considerando desde diversos ámbitos de la tradición marxista, no está tan distante de los problemas centrales abordados por K. Marx en su trabajo sobre El Capital. De este modo localizamos los puntos en común en los que se cruzan ambos pensadores, intentando vislumbrar las posibilidades que esta conjunción filosófica puede aportar en el orden de la filosofía del derecho al presente y futuro de nuestras sociedades. Sobre todo, tratamos de mostrar cómo los problemas abordados en El Capital  introducen una suerte de «a priori empírico», que el principio trascendental del derecho debe tener en cuenta para que no sea fagocitado o arrinconado frente al mundo real.

Numerosos son los puntos de encuentro que mantienen la filosofía crítica de I. Kant y la crítica de la economía política que desarrolla K. Marx en su obra El Capital. A lo largo del siglo XX diversos autores y especialistas han resaltado no sólo las profundas diferencias que separan a ambos autores, sino también el enorme potencial que tiene su posible conjunción filosófica en relación a la filosofía del derecho. 

21/4/15

El valor de El Capital de Karl Marx en el siglo XXI

Karl Marx ✆ Grau 
Esteban Mercatante   |  El trabajo, como fuente única de generación de valor, y del plusvalor, es el pilar de todo el edificio conceptual de El capital. No sorprende que la teoría del valor haya estado bajo ataque casi desde que fue formulada, ya que demuestra cómo la explotación es la base del capitalismo. Las críticas han ido desde el intento de probar las inconsistencias en el desarrollo conceptual de Marx, hasta el planteo de que una economía capitalista que se habría transformado a tal punto, requeriría otras leyes para ser explicada. Ya hemos discutido en oportunidades anteriores con planteos de esta índole [1]. En este artículo discutiremos la tesis del “capitalismo cognitivo”, que afirma que el capitalismo se habría transformado en una economía del conocimiento, lo que significaría un cambio cualitativo en las bases de la economía capitalista analizada por la economía política clásica y el propio Marx [2]. Muchos autores que la defienden lo hacen abrevando en conceptos de Marx, pero para cuestionar postulados centrales de su teoría del valor.

Producción de conocimiento y capital

Bajo el rótulo de “capitalismo cognitivo” se encierra la idea de que el conocimiento es “el principal factor productivo” [3]. Lo que se quiere decir es que la centralidad de la producción de valor, y de ganancia, habría salido de la esfera de la producción de mercancías físicas. En las ramas más dinámicas de la economía capitalista actual (informática, máquinas herramienta complejas, biotecnología, nanotecnología, etc.) la relevancia creciente de la aplicación de conocimiento habría desplazado a la explotación de la fuerza de trabajo como fuente de valorización fundamental del capital. 

19/4/15

Il capitale monopolistico di Baran & Sweezy e la teoria marxiana del valore

Claudio Napoleoni   |   [Affronterò ora la questione dei caratteri generali del volume di Baran e Sweezy, Il capitale monopolistico.] Il volume affronta il problema del realizzo del plusvalore, in riferimento alla forma che il capitalismo assume nella sua fase attuale caratterizzata dalla sempre maggiore diffusione del monopolio. In questa fase i problemi del realizzo assumono una particolare rilevanza. Il plusvalore in questa fase è più grande che nelle fasi precedenti. A seguito dell’acuirsi dei problemi di realizzo il capitale è costretto a cercare sempre nuove vie per raggiungere i suoi scopi. Vengono qui esaminate le vie che il capitale segue per superare queste sue contraddizioni, per la verità assai rilevanti e tali da generare comunque problemi sociali rilevantissimi. Questa fase di sviluppo del capitalismo in definitiva viene ad essere caratterizzata da una crisi immanente, continua, causata da una serie di diseconomie che sono implicite nel sistema económico. Per economia monopolistica si intende una economia in cui le singole imprese sono in grado di influenzare direttamente i prezzi di vendita. In questa fase le imprese, pur non rinunciando a farsi concorrenza, tuttavia in genere non scelgono la via di farsi concorrenza giocando al ribasso dei prezzi, in quanto ciò da un lato non consentirebbe una vittoria sicura, dall’altro lato causerebbe rilevanti perdite.

Grèce: Keynes ou Marx?

John Maynard Keynes & Karl Marx ✆ Carlín
Les conceptions de Costas Lapavitsas sont influentes au sein du Courant de gauche de Syriza, le principal courant critique vis-à-vis de la direction d’Alexis Tsipras. Dans une interview parue récemment sur le site états-unien du “Jacobin” 1, Lapavitsas affirmait que ce sont les idées de Keynes et non celles de Marx qui permettent de comprendre la crise grecque et comment y répondre. L’économiste marxiste britannique Michael Roberts a réagi à ces propos dans ce texte paru sur son blog le 14 mars 2015 2 

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Michael Roberts   |   Les Grecs ont donc obtenu un répit de quatre mois, marqué par la prolongation du plan de « sauvetage » accordé entre l’ancien gouvernement conservateur et la Troïka. Mais cet espace de respiration déjà limité ne cesse de se réduire. L’économie grecque continue de suffoquer3.  C’est le moment de réfléchir à une solution pour le peuple grec à l’issue de ces quatre mois.

18/4/15

Marx y los Anales franco-alemanes

Karl Marx ✆ Ani
Sebastián Urbina Tortella   |   En 1843 Carlos Marx escribe la "Introducción a la Critica de la filosofía del derecho de Hegel" y la "Cuestión Judía" que se incorporarían al primer y único ejemplar de los Anales franco-alemanes. El respaldo material de esta revista fue posible gracias a Arnold Ruge, que se encontraba en mejor situación económica que el resto de los componentes de la difícil empresa, Marx, Hess, Bakunin, etc. Las dificultades no eran solo de tipo material, relativamente solucionadas, sino problemas derivados de la censura y la policía y de las diferentes mentalidades e intereses intelectuales de la abigarrada plantilla de colaboradores.

Aunque hubo conformidad en que París fuese la ciudad en la que se publicarían los Anales, tanto por ser un centro político y demográfico como por la existencia de una numerosa colonia alemana, las diferencias entre los principales inspiradores de la revista, Ruge y Marx, no podrían dejar de manifestarse. En los meses anteriores a la publicación de los Anales, que tuvo lugar en Febrero de 1844, se produjo una relación epistolar entre los principales animadores de la revista, aunque nos interesa especialmente la que se estableció entre Marx y Ruge. La impresión que dan las tres cartas que Marx le escribió es la de que no quería mostrar, en toda su extensión, su verdadero pensamiento por miedo a provocar un enfrentamiento con Ruge que diera al traste con los Anales, aunque la ruptura con Ruge se produciría más tarde, en el mismo año 1844, por sus divergencias políticas.

Comunismo y reflexión sobre la Historia en la obra de Karl Marx

Karl Marx ✆ Matt Soffe 
Francisco José Martínez   |   Se trata de realizar dos calas en los escritos marxianos: los artículos y trabajo de 1843 y 1844 centrados en torno a los Anales Franco Alemanes y los análisis de la guerra civil en Francia y la Comuna de París. A partir de dichas calas se sostiene el carácter antidealista y antiutópico del pensamiento marxiano, y especialmente de su idea de comunismo, las relaciones entre la superación de la filosofía y la abolición del proletariado, su ajuste a la realidad contemporánea como punto de partida esencial para su comprensión y transformación, y su clarividencia sobre la centralidad de la ciencia en el proceso productivo así como sobre el carácter colectivo de dicho proceso de la producción capitalista desarrollada.

Hay muchos Marx. Yo aquí voy a presentar uno, o mejor dicho dos. Este Marx bicéfalo es un Marx de diseño, de autor, que sólo se basa en mi gusto personal, aunque espero mostrar en este escrito que esta presentación no es totalmente arbitraria y que puede ofrecer una luz distinta para volver a enjuiciar al viejo Marx, un clásico que cada vez tiene más que decir, no sólo en su actitud vital y práctica sino también en sus aportaciones teóricas. La primera cara de este Marx polifacético, poliédrico, es la que se nuclea en torno a los Anales Franco-Alemanes, la revista que nuestro autor codirigió con Ruge en 1843-1844. Esta época es la época en la que Marx va pasando paulatinamente del liberalismo crítico del absolutismo feudal al socialismo comunista, pasando de la mera crítica política a la crítica social, tránsito teórico y práctico basado en dos descubrimientos claves para él: la economía política inglesa que conoce a través de Engels y de sus propias lecturas y el socialismo político francés que conoce directamente en los círculos revolucionarios parisinos. 

17/4/15

El camino del método | La totalidad en Marx no es un sistema cerrado, sino abierto

Karl Marx ✆ Natalia Rizzo 
Ariane Díaz   |   En el epílogo de 1873 a la segunda edición alemana de El capital, Marx sentencia que el período innovador de la economía política –al que pertenecería Ricardo, por ejemplo–, a medida que la lucha de clases se agudizaba, se convertía en mera propaganda burguesa: “… la mala conciencia y las ruines intenciones de la apologética ocuparon el sitial de la investigación científica sin prejuicios” [1]. Por otro lado, glosa las lecturas contradictorias que se habían hecho de su método: sindicado entre los grandes analíticos o bien entre los grandes metafísicos, entre los realistas o entre los idealistas, hubo quienes le reprocharon centrarse en la crítica de lo real y no dar “recetas de cocina para el bodegón del porvenir”, mientras otros denostaron un exceso de hegelianismo.

Economía y filosofía; método analítico y dialéctico; ciencia, crítica e ideología; la herencia de Ricardo y Hegel: combinados o como polos excluyentes, estas coordenadas van a cruzar las interpretaciones que hicieran los marxistas durante todo el siglo XX. Mientras el revisionismo de la II Internacional cuestionó a la dialéctica, Lenin y Trotsky vieron en ella una herramienta para dar cuenta de los desafíos políticos que abría la época imperialista [2]. 

El efecto hegeliano sobre el marxismo y la problemática del proletariado

Karl Marx & G.F. Hegel ✆ A.d. 
Emre Görür   |   “Nosotros como hegelianos armamos con la ideología y la ciencia del espíritu. Nuestra obligación es llevar la conciencia al espíritu para que ejecute su misión histórica. Nuestro éxito es la garantía de la subjetividad.”

I. Por supuesto ésta no es una cita. El que sabe lo que significa el espíritu no defiende esta opinión. Un marxista promedio sabe que las palabras como éstas son absurdas. Bueno, si escribimos “marxista” por “hegeliano” y “proletariado” por “espíritu” ¿qué cambia? Si el proletariado se ve como el sujeto histórico, teóricamente no cambia nada. Esta situación muestra que los argumentos teóricos de muchos marxistas son débiles. Marxistas generalmente definen dos sujetos: el proletariado como sujeto histórico y la organización o el partido como sujeto político. En general esta separación se saca de la total aritmética de la obra de Marx y Lenin: de la de Marx y Engels se saca el sujeto histórico y de la de Lenin la opinión de llevar conciencia desde fuera. Por este concepto, aceptar el proletariado como sujeto histórico es una de las cláusulas principales de ser marxista, pero “como enseñó Lenin”, el proletariado necesita un admonitorio para tener esta cualidad. ¡El proletariado es el sujeto histórico, pero si el partido marxista le lleva la conciencia política!

16/4/15

L’estetica di Lukács fra arte e vita | Considerazioni storiche, politiche e filosofiche

Costanzo Preve   |   Georg Lukács (o se si vuole in ungherese Lukács György, con il nome proprio che segue il cognome) non è stato soltanto un grande teorico dell’Estetica, o più esattamente della specificità del fatto estetico (Eigenart des Ästhetischen), come preferiva sobriamente esprimersi e come ha intitolato il suo capolavoro sistematico dedicato appunto all’estetica, ma è stato uno dei massimi testimoni filosofici del novecento. Per questa ragione una trattazione esclusivamente specialistica delle sue posizioni sull’arte sarebbe fuorviante, perché nella visione “classica” di Lukács (che era poi anche quella di Hegel e di Marx, i suoi maggiori maestri) l’Arte era un momento del grande processo dialettico dell’emancipazione umana. Cercherò di “arrivare” a questa conclusione interamente “estetica” con una serie di approssimazioni di tipo storico, politico e filosofico.
1. Lukács, un uomo che seppe sempre essere presente agli “appuntamenti storici” del Novecento

14/4/15

Historia de una (presunta) inconsistencia | Sobre la formación de una tasa media de ganancia

Esteban Mercatante   |   La solución que ofreció Marx al enigma irresuelto por la economía política clásica, cómo se forma una tasa media de ganancia y por qué las contradicciones que esto tendría con las diversas tasas de excedente de los capitales es sólo aparente, fue transformada posteriormente en piedra de toque para atacar la consistencia de la teoría de Marx.

Valores y precios de producción

Marx realiza en El capital una construcción que se mueve del terreno más abstracto hacia niveles mayores de concreción a lo largo de la obra. Así, en el tomo I considera todo el tiempo que las mercancías se venden a sus valores. Es decir, que se cambian estableciendo una equivalencia según los tiempos de trabajo medio socialmente necesario que lleva producirlas. Por eso, cuando introduce la categoría de plusvalor, que surge del tiempo de trabajo que realizan los trabajadores bajo el mando del capital por encima del que les lleva reponer el valor de su fuerza de trabajo, considera a lo largo del tomo I que cada capital realiza íntegramente el plusvalor que extrae de sus obreros. Si las mercancías se venden a sus valores, cada capitalista realiza todo el plusvalor contenido en su mercancía. Sin embargo, sabemos que no es así como los fenómenos se producen a un nivel más concreto. Y esto, Marx lo anuncia en el tomo I:

La importancia del capítulo XXIV de El Capital para la historia latinoamericana

Eduardo Grüner   |   Quisiéramos comenzar citando textualmente un párrafo ya canónico, extraído del capítulo XXIV de El Capital de Marx. El párrafo dice así:
El descubrimiento de las comarcas auríferas y argentíferas en América, el exterminio, esclavización y soterramiento en las minas de población aborigen, la conquista y saqueo de las Indias Orientales, la transformación de África en un coto reservado para la caza comercial de pieles-negras, caracterizan los albores de la era de la producción capitalista. Estos procesos idílicos constituyen factores fundamentales de la acumulación originaria. Pisándoles los talones, hace su aparición la guerra comercial entre las naciones europeas, con la redondez de la tierra como escenario [1].
 La verdad es que este párrafo es extraordinario. En pocas líneas plantea, de manera ultra-condensada, prácticamente todos los temas que deberemos desplegar a continuación. Empecemos, entonces, por hacer el listado de esas cuestiones que está planteando el párrafo.

13/4/15

Socialismo ecológico antiimperialista

Foto: Iñaki Gil
de San Vicente
Iñaki Gil de San Vicente   |   La ponencia que aquí se ofrece es la continuación de la presentada a debate en 2010, de la que luego se habla. En estos cinco años la crisis socioecológica se ha agravado a la vez que se ha endurecido el imperialismo ecológico [1]. Recientemente, Beinstein ha recurrido al mito antiguo greco-egipcio de Uróboros, la serpiente que se come a sí misma empezando por su cola hasta la cabeza para reiniciarlo de nuevo, una y otra vez [2] para mostrarnos lo que realmente sucede. El aumento de la precariedad vital está dando la razón a Engels: «La organización de los obreros y su resistencia creciente sin cesar levantarán en lo posible cierto dique ante el crecimiento de la miseria. Pero, lo que crece indiscutiblemente es el carácter precario de la existencia» [3]. La ONU y la FAO recomiendan que se produzcan en masas insectos, escarabajos y gusanos comestibles [4] para prevenir las hambrunas que se acercan.

Con el actual nivel de desarrollo potencial de las fuerzas productivas bajo control de poderes populares, se podría acabar con esa precariedad vital que destroza la vida. Hoy existen recursos científicos y técnicos capaces de prevenir con alta verosimilitud el agravamiento de la crisis socioecológica y el consiguiente empeoramiento de la precarización de la vida humana. Por ejemplo, es muy probable que los efectos causados por el calentamiento climático en Europa y en el Ártico sean desastrosos para las clases explotadas, aunque «las petroleras ven en el deshielo del Ártico la oportunidad económica» [5].

Las crisis históricas del sistema capitalista, la crisis sistémica actual, sus causas inmanentes y las propuestas superadoras

Evolución histórica de las crisis generales del capitalismo. Sus causas inmanentes. Fase actual de la crisis, con tendencia a hacerse permanente y sistémica. Propuestas de regulación económica alternativas, de carácter social, para superar la crisis en favor de los sectores populares.

Carlos Mendoza    |   El capitalismo de esta época está sumido en una crisis caracterizada como de carácter sistémico. Por otro lado a lo largo de su historia el sistema ha pasado por otras etapas de crisis profundas y generalizadas. Ocurre que el sistema se rige por leyes inmanentes o de esencia, descubiertas por Carlos Marx (y desarrolladas por otros teóricos marxistas), que le generan tendencia intrínseca a la crisis. Para recorrer la historia de las principales crisis del capitalismo, conviene siempre recordar cuáles son esas leyes de esencia que lo rigen. En tal sentido, retomo a continuación lo escrito por mí (con algunas modificaciones) en un artículo anterior (Crisis Financiera. Crisis Sistémica- Revista Tesis 11, Nº 89)

10/4/15

Marxismo & ecología | Marx-Engels-Podolinskij: Una traccia teorica perduta?

Karl Marx ✆ A.d.
Tiziano Bagarolo   |   Prendendo spunto dalle indicazioni fornite da Juan Martinez Alier in Ecological Economics, l’autore affronta il tema del rapporto fra il marxismo e l’ecologia alla luce del carteggio intercorso nel 1880 fra Karl Marx e un giovane intellettuale socialista ucraino, Sergej Podolinskij. Quest’ultimo, partendo dai principi della termodinamica, in un saggio pubblicato in alcune riviste socialiste europee aveva proposto una revisione della teoria marxiana della produzione. Secondo l’autore, l’approccio di Podolinskij conteneva alcune idee anticipatrici circa la natura entropica dei processi economici e il duplice processo di accumulazione e di dissipazione dell’energia solare che si svolge sulla superficie terrestre, ad opera il primo delle piante e il secondo delle altre forme viventi. La fecondità delle idee di Podolinskij, tuttavia, non fu intesa adeguatamente; Engels si espresse in proposito in modo sostanzialmente (anche se non interamente) negativo in due lettere a Marx del dicembre 1882. Entrambi furono ostacolati nel giudizio per il fatto che non avevano ancora fatto approfonditamente i conti con il principio di entropia e le sue implicazioni. In effetti, l’elaborazione della “critica dell’economia politica” era avvenuta in una fase precedente a quella in cui essi cominciarono a riflettere sul secondo principio. Anche per questo, malgrado la presenza negli scritti e nel pensiero di Marx e di Engels di significativi temi “ecologici”, rimase nel marxismo una concezione inadeguata e ambivalente di “sviluppo delle forze produttive” e ciò ha in parte contribuito al “lungo divorzio” tra marxismo ed ecologia.

Crítica del marxismo. Reflexiones sobre las causas de la libertad y de la opresión social

Simone Weil
© Shoshana Kertesz
Simone Weil   |   Hasta ahora, todos los que han experimentado la necesidad de apuntalar sus sentimientos revolucionarios con concepciones rigurosas han encontrado o han creído encontrar estas concepciones en Marx. Se sabe definitivamente que Marx, gracias a su teoría general de la historia y a su análisis de la sociedad burguesa, demostró la necesidad inevitable de una próxima transformación en la que la opresión que nos hace sufrir el régimen capitalista sería abolida; persuadidos de ello, se evita incluso, en general, examinar más de cerca la demostración. El “socialismo científico” ha llegado a convertirse en dogma, exactamente como sucede con los resultados obtenidos por la ciencia moderna, resultados en los que todos piensan que deben creer sin plantearse nunca el cuestionamiento del método. Respecto a Marx, si se intenta asimilar verdaderamente su demostración, en seguida se percibe que comporta muchas más dificultades de las que la propaganda del “socialismo científico” permite suponer.

En realidad, Marx da cuenta admirablemente del mecanismo de la opresión capitalista, pero lo hace sin mostrar apenas cómo este mecanismo podría dejar de funcionar. De ordinario, no se considera de esta opresión sino el aspecto económico, es decir, la extorsión de la plusvalía; desde este punto de vista, ciertamente, es fácil explicar a las masas que esta extorsión está ligada a la competencia, esta a la propiedad privada, y que el día en el que la propiedad devenga colectiva todo irá bien. Sin embargo, incluso en los límites de este razonamiento, aparentemente simple, ante un examen atento surgen mil dificultades. 

9/4/15

Algunas formulaciones económicas de Marx y la actual crisis económica mundial – I & II

Karl Marx ✆ Pierre Piech 
Orlando Caputo   |   Es muy frecuente que cuando se analiza la crisis económica actual, se critique esta especificidad señalando que existen otras crisis, que hay varias crisis simultáneas: económica, energética, alimentaria, del medio ambiente, crisis estructural de larga data e incluso, en una perspectiva más general, se habla de crisis sistémica. Desde nuestro punto de vista en perspectiva histórica, el capitalismo mundial está destruyendo a la sociedad y a la naturaleza, lo que hace cada vez más urgente un profundo cambio a nivel planetario.1, 2 

Pero sin embargo, es necesario analizar la crisis económica actual, la que como otras crisis tiene su especificidad. La crisis económica actual debe ser un objeto de estudio en sí misma. Un análisis concreto de la realidad concreta. Más aún, porque hay grandes transformaciones económicas a nivel de los países y de la economía mundial desarrolladas desde hace décadas y consolidadas a inicio del siglo XXI. En este documento, -marzo de 2015-, se hace una síntesis y adaptación del punto II de nuestro documento, “Marx y la crisis actual de la economía mundial”, de octubre de 20133, publicado en 2014 en libro “Debates sobre Marxismo”, Editorial América en Movimiento, editores y compiladores, Paula Vidal et al.

Cultura y Revolución | En el cincuentenario de la muerte de Marx

Karl Marx ✆ A.d. 
Mijail Lifshits   |   El 14 de marzo de 1883 murió un hombre a quien le estuvo destinado gozar de un privilegio peculiar: ser odiado por todas las fuerzas dominantes de la vieja sociedad. Muchas fechas memorables han atraído la atención pública en los últimos años. Nunca como hoy se habían celebrado tantos jubileos. Nunca la memoria de los grandes pensadores y artistas del pasado había estado tan indisolublemente vinculada con las luchas del presente. En este entrelazamiento de la historia y la contemporaneidad, se expresa la exigencia de nuestra época de llegar a determinadas conclusiones con respecto al ciclo de desarrollo histórico representado por hombres como Spinoza y Goethe, Hegel y Wagner.

La burguesía ha instituido festejos en honor de estas personalidades, ha puesto en funcionamiento todos sus medios de propaganda con el fin de demostrar que la reacción cultural de nuestros días constituye el desarrollo superior de sus ideas. Ministros y diputados han salido de sus oficinas gubernamentales y se han levantado de sus sillones parlamentarios para pronunciar discursos solemnes en honor de la “conciliación de las contradicciones” hegeliana o del “renuncia” goetheana. Pero en honor del gran líder del proletariado Karl Marx, las clases pudientes de su tierra natal organizaron festejos de género muy diferente. 

8/4/15

Karl Marx: ‘Sobre la acción política de la Clase Obrera’ – 1871

Karl Marx
✆ Maximilian Jungwirt 
Ariel Mayo   |   La producción teórica de Marx opacó su actividad política, que ha permanecido en un segundo plano frente a los innumerables estudios dedicados, por ejemplo, al análisis de El capital (1867). No obstante, para Marx su militancia política se encontraba al mismo nivel que sus trabajos teóricos, puesto que el propósito fundamental de toda su actividad era la lucha por el socialismo. Además, y no menos importante, la escisión entre teoría y política se contrapone a los principios del método dialéctico, cuya aplicación supone tratar a la sociedad como un todo, evitando la división del trabajo, propuesta por la burguesía, entre teoría (reservada a los académicos) y política práctica (a cargo de los políticos profesionales).

El punto cumbre de la militancia política de Marx es su participación en la Asociación Internacional de Trabajadores (AIT a partir de aquí; también llamada Primera Internacional). La AIT se constituyó en 1864 y desde el principio Marx jugó un rol primordial en ella, a punto tal que tuvo a cargo la redacción del Saludo Inaugural y de los Estatutos de la AIT. El trabajo de Marx en la Primera Internacional tuvo dos principios rectores: a) mantener unificado al movimiento obrero, dividido en varias corrientes ideológico-políticas; b) dirigir dicha unificación hacia la construcción de una alternativa política obrera, autónoma de la burguesía. En otras palabras, la acción de Marx estuvo orientada a la superación del momento corporativo del movimiento obrero (v.gr., lucha por mejoras salariales) y por lograr el pasaje al momento de la lucha política. En este sentido, Marx tuvo como contrincantes a los partidarios de la otra gran estrategia obrera de la época, el abstencionismo político.

Estancamiento secular, tiempo libre y marxismo

Según una nota reciente del Financial Times, el debate sobre estancamiento secular es una de las discusiones económicas más importantes de la actualidad. El articulista agrega que el otro gran debate es el referido a las fuentes de la desigualdad. Estamos de acuerdo aunque consideramos que los temas están más ligados de lo que parece

Paula Bach   |   Dedicamos a un asunto y a otro, múltiples artículos de esta columna. Nos interesa esta vez retornar sobre las cuestiones demográficas que los mentores del estancamiento secular enarbolan como una de las causas explicativas centrales de su tesis. Como señalamos en Lo que es bueno para la humanidad no lo es para el capital, el escaso crecimiento poblacional en los países centrales, resulta para los economistas, una de las explicaciones más exhaustivas del bajo crecimiento económico durante las últimas décadas. La cuestión está adquiriendo cada vez mayor lugar como problema estructural del crecimiento económico capitalista. Veamos algunos ejemplos en términos -si se quiere- prácticos. Dice Financial Times, que Japón intenta escapar a dos décadas de deflación y el denominado programa de tres flechas -por sus facetas monetaria, fiscal y estructural- impulsado por el primer ministro Shinzo Abe, estaría fallando fundamentalmente en su aspecto estructural.