Foto: Christopher Hill |
Miguel Lagrotta | Dentro
del programa propuesto por el Prof. Devoto el caso inglés me motivó
a desarrollar una aproximación sencilla a tres autores británicos
que han trabajado mucho y en distintos planos historiográficos. Para iniciar el
tema tomaremos la definición del problema propuesta por Devoto […]:
“ la historiografía inglesa es, de todas las historiografías europeas, la más empírica, en la cual el empirismo es la práctica natural del historiador y ese empirismo lleva, efectivamente, a que algunas dimensiones de la historia hayan sido muy poco desarrolladas en el siglo XX en Inglaterra como por ejemplo la filosofía de la historia. En el caso inglés la ciencia social más desarrollada es la economía, entonces uno podría decir: la historiografía inglesa es en buena medida, a lo largo del s. XX una historiografía política y cuando no es una historiografía política es una historiografía económica.” [1]
El resultado de toda investigación, incluso modesta como la
presente, debe igualmente conducir a una reflexión final que debería superar y
apuntalar las conclusiones. Edward P. Thompson señala al respecto que:
“Sólo nosotros, los que ahora vivimos podemos dar un “sentido” al pasado. Ahora bien, este pasado siempre ha sido, entre otras cosas, resultado de un razonamiento de valores. Al recuperar ese proceso, al mostrar cómo aconteció realmente la secuencia causal,