22/11/13

La determinación de la ‘Expresión Monetaria del Tiempo de Trabajo’ (MELT) en el caso del Dinero no Mercancía

Karl Marx
✆ Sungyoon Choi 
Fred Moseley  |  Este trabajo sugiere una manera para determinar la “expresión monetaria del tiempo de trabajo” (el (MELT por sus siglas en inglés: monetary expression of labor time) en el régimen actual de dinero crédito inconvertible, una manera que es consistente con la teoría general del dinero de Marx y que es cuantitativamente igual a la determinación de Marx del MELT para el caso de dinero fiduciario inconvertible de su tiempo. Para explicar este método de determinación del MELT en el caso de dinero crédito inconvertible moderno el trabajo primero revisa la determinación del MELT que hace Marx en el caso del dinero mercancía y en el caso del dinero fiduciario inconvertible de su tiempo. La sección final del trabajo discute las similitudes y diferencias entre mi interpretación y la interpretación de Saros (2007) del MELT en el caso de dinero fiduciario inconvertible.

La “expresión monetaria del trabajo” (MELT por sus siglas en inglés: monetary expression of labor time) es una variable crucial en la teoría de Marx, no obstante, no ha recibido la atención que merece. El MELT es el factor multiplicativo que determina cuánto valor dinerario se produce por hora de tiempo de trabajo socialmente necesario. Es bien conocido que Marx asumió en El Capital que el dinero es una mercancía producida, como el oro. Bajo este supuesto el MELT se determina por el inverso del valor del oro, es decir por la cantidad de oro producida por hora de trabajo socialmente necesario. Sin embargo, en el capitalismo moderno el patrón oro ha sido abandonado y el MELT

Historia de un no debate | La trayectoria de la teoría marxista de la dependencia en Brasil

Fernando Correa Prado  |  El debate acerca de la dependencia en América Latina fue inmenso. En los años 1960 y 1970 un conjunto de intelectuales y militantes, de diversos orígenes y filiaciones políticas, ha tratado del tema de la dependencia, generalmente utilizando esta categoría como característica central de sus análisis sobre las regiones periféricas y, en particular, sobre América Latina. Si en el inicio de la década de 1950 la cuestión del desarrollo y del subdesarrollo fue puesta en el centro del debate mundial, con impactos significativos para la esfera política e intelectual de la región, a partir de mediados de la década de 1960 la cuestión de la dependencia ya empieza a ganar terreno y se convierte en una categoría en disputa, cargada de diferentes matrices teóricas y políticas. Por cierto, es posible decir que la vitalidad de los análisis acerca de la dependencia latinoamericana deriva precisamente de la amplia controversia por detrás del tema, impulsada, a su vez, por la coyuntura específica por la cual pasaba América Latina entonces – una coyuntura que, entre tantas expresiones, vivía el impacto de la Revolución Cubana de 1959; era escenario del auge de la ideología

Capitalismo finanziario globale e democrazia | La stretta finale

  • La relazione causale tra finanziarizzazione del capitale globale e il crollo della democrazia, particolarmente in Europa (continente in cui il compromesso fra capitale e lavoro aveva raggiunto uno dei punti più avanzati), è giunta ad una fase estrema: quella che segna la manifesta incompatibilità di questo moderno capitalismo con le forme della democrazia fin qui conosciuta. Si pone il problema di un nuovo soggetto della trasformazione
Eurocrisis ✆ Len
Alfonso Gianni  |  Vi è una connessione che merita di essere indagata tra i processi di intensa finanziarizzazione del capitale e quelli di “democratizzazione” dei sistemi istituzionali, sia nei singoli stati nazionali sia, e soprattutto, nelle entità sovrannazionali, quale quella europea. Questa connessione è tanto più evidente se si concepisce la democrazia non solo nella sua definizione classica di partecipazione, attraverso forme e modi definiti, dei cittadini al processo decisionale che regola la cosa pubblica, ma anche nella sua determinazione storicamente affermatasi particolarmente in Europa nella prima parte della seconda metà del XX secolo, di un complesso sistema istituzionale che in nome e per conto dei cittadini interviene tramite il potere pubblico e politico sulla ridistribuzione della ricchezza sociale prodotta, con criteri di tendenziale equità sociale che si differenziano nettamente dai meccanismi più o meno spontanei indotti dal libero mercato. In altre parole se vi è una dimostrazione, direi in corpore vili, della non sopravvivenza della democrazia politica senza che ad essa si affianchi una democrazia economica, questa è