20/10/15

Valores, precios y la ausencia de necedad: la conjura de los austriacos — Una aportación al debate entre las escuelas marxista y austriaca

Foto: Eugen von Böhm-Bawerk & Karl Marx
Jesús Rojo   |   Entre las muchas corrientes de pensamiento económico que han intentado persistentemente incluir al marxismo en el obituario de las teorías fracasadas, la escuela austriaca es quizás la más seria en lo que a su crítica se refiere. En efecto, «el más encarnizado adversario del marxismo es precisamente la escuela austriaca» (1). En este sentido, dado que esta escuela nació con posterioridad al marxismo y, de alguna manera, como reacción a este, la batalla se presenta en una situación ofensiva para los austriacos y defensiva para los marxistas.

La sonada crítica proferida por Böhm Bawerk contra Marx fue fugazmente respondida por Hilferding quien, con mucho tino, trató de desmontar los argumentos fundamentales que el primero sostenía principalmente respecto a los libros I y III de El Capital. Pocos años más tarde, durante su estancia en Viena, Bujarin completó (de manera menos lúcida) el proceso de respuesta a la crítica que había iniciado su compañero alemán. La participación de figuras como Rothbard y otros autores del liberalismo (así como del socialismo, pero ya de menor calado) mantuvo la polémica viva hasta el final del siglo XX.

Determinaciones Simultánea y Temporal en la Teoría Económica Marxista — I, II, III & IV

Karl Marx ✆ I. J. Bowden
A. Sebastián Hdez. Solorza & Alan A. Deytha Mon   |  Existen dos vertientes generales dentro de la teoría económica marxista por la manera en que determinan los conceptos más relevantes (el valor, los precios, la tasa de ganancia, etc.): la simultaneista y la temporalista.

Todas las corrientes que sostienen la determinación simultánea, sin importar su origen, sus intenciones, o su “apego” a las palabras de Marx, concluyen (consciente o inconscientemente) que la teoría del valor de Marx es innecesaria (redundante), que Marx fue inconsistente al explicar la determinación de los precios (el famoso “problema” de la transformación), que el plustrabajo no es la única fuente de plusvalor (ganancia) y que Marx se contradice porque la tasa de ganancia tiende a subir y no a bajar cuando se ahorra trabajo vivo por incrementos en las fuerzas productivas (‘tecnología’).

La determinación simultánea de los conceptos en la teoría económica marxista se ha aceptado por dos vías: 1) la aceptación por convencimiento y 2) la aceptación por falta de conocimiento.