Karl Marx & Hegel ✆ A.d. |
Hay una expresión célebre de Marx a propósito
de la violencia que puede constituir un buen punto de partida para intentar
describir su sintaxis: en el momento culminante del capítulo 24 de El
Capital, dedicado, como se sabe, a la acumulación originaria, Marx exclama:
«La violencia [Gewalt] es la comadrona [Geburtshelfer] de toda
sociedad vieja que lleva en sus entrañas otra nueva. Es, por sí misma, una
potencia [Potenz] económica»1. Precisamente por encontrarse al culminar
el capítulo sobre la acumulación originaria, tal sentencia parece darnos la
clave de lectura, el sentido y el resumen conceptual de la pluralidad de
historias que allí son descritas. ¿Es así verdaderamente? Volveremos sobre ello
más adelante. Contentémonos, por ahora, con analizar más de cerca la
proposición marxiana. ¿Qué es lo que indica la metáfora usada? 1) La violencia
es, en efecto, una potencia económica, pero marginal respecto al proceso
histórico; 2) la nueva sociedad existe ya en el interior de la vieja y
solamente espera surgir. Si, más allá del significado común de la metáfora,
indagamos el uso que de ella ha hecho la tradición filosófica, encontramos que
la metáfora de la gravidez está en el centro de la monadología leibniziana y de
la concepción de la temporalidad a la que remite: «el presente está preñado del
porvenir»2, afirma Leibniz en el parágrafo 22 de la Monadología, «el
presente está preñado del futuro, el futuro se puede leer en el pasado»3,
agrega en el parágrafo 13 de los Principios de la naturaleza y de la
gracia.