28/2/14

Evocando a Francisco Posada | La labor de recuperación de la memoria de uno de los grandes intelectuales del siglo XX colombiano

Foto: Francisco Posada
Medófilo Medina  |  Francisco Posada estaría cumpliendo en 2014 ochenta años. Murió hace 40. Desde 1970 cubrió a esta figura de la historia intelectual colombiana un manto de silencio. Por iniciativa de María Cristina Posada, competente promotora cultural, se prepara un homenaje nacional a Francisco Posada, que tendrá lugar en El Socorro los días 17 y 18 de marzo. ¿Por qué en esa ciudad? Una obra póstuma de quien aquí evoco, publicada en 1971, se titula: El movimiento revolucionario de los Comuneros.

De manera simultánea se conmemora el acontecimiento y se rinde tributo a uno de los autores que lo investigó. Son múltiples las facetas de la breve parábola vital de Posada. En 1958 fundó la revista Tierra Firme, que fue la primera publicación moderna dedicada a las Ciencias Humanas en el país. Buscaba Posada abrir en Colombia las ventanas a las corrientes avanzadas del pensamiento mundial, al psicoanálisis, al marxismo, al existencialismo. Es cierto que desde los tiempos de Baldomero Sanín Cano se dieron tentativas de apertura, pero se restringían a la poesía y la literatura. (Miguel Ángel Urrego ofrece una reseña de Tierra Firme en ‘Intelectuales, Estado y Nación en Colombia’, publicado en 2002). En la revista al lado de artículos de Heidegger, Jean Hippolite, Merleau-Ponty pusieron sus ensayos intelectuales colombianos como Jorge Child, Eduardo Cote Lamus y José Olmedo.

Hoy sorprende la amplitud de la visión de Posada sobre la historia de la cultura del país, la cual se advierte al leer su ensayo ‘Ideas sobre la cultura nacional y el arte realista’, publicado en la revista Letras Nacionales en febrero de 1965. Desde la época colonial hasta la fecha cuando se publica el trabajo, el autor lleva a cabo un inteligente rastreo por la literatura y la poesía, las artes plásticas, los primeros pasos del cine nacional. Al tiempo consigna sus comentarios como crítico tanto con respecto a la literatura como al arte. Presenta algunas de las tendencias de la teoría estética en el mundo. Mantienen su interés las líneas polémicas que esboza con respecto a los juicios, no pocas veces muy prescriptivos de Marta Traba sobre los artistas nacionales.

Guarda todo su interés polémico el análisis que Francisco Posada ofrece sobre la Violencia de 1946 a 1964 en su libro Colombia: violencia y subdesarrollo, publicado por la Universidad Nacional en 1969. Llama la atención su hipótesis de que la Violencia habría sido el camino mediante el cual las clases dominantes habrían mantenido en Colombia el subdesarrollo en oposición a visiones que, como la de Estanislao Zuleta, apreciaron la Violencia como el derrotero por el cual avanzaron las relaciones capitalistas en el campo colombiano.

Su interés por la discusión teórica sobre el modo de producción asiático, que alcanzó relevancia en círculos académicos franceses, lo llevó a medir sus instrumentos de análisis con el estudio de los muiscas. Un ensayo publicado en dos artículos en la revista Documentos Políticos, Nos. 55/56, Bogotá, 1965/1966, marcan esa estación de la insaciable curiosidad intelectual de Posada.

El marxismo latinoamericano fue otro campo en el que Francisco Posada hizo sus aportes en los estudios sobre el intelectual peruano José Carlos Mariátegui. Con notable originalidad y convicción se empeñó en introducir en el país los modelos estéticos de la teoría del Teatro Épico, propuesta por Bertold Brecht. En este campo estuvo secundado por el trabajo artístico y organizativo de Santiago García en el tiempo de su primera tentativa de crear un grupo teatral: El Teatro Estudio de 1963. Por el mismo tiempo trabajó con el grupo Nuevo Teatro, dirigido por Dina Moscovicci, quien se convertiría en su compañera. Francisco Posada tuvo en la Universidad Nacional en Bogotá su campo inmediato de influencia intelectual. Era la Universidad de la Reforma decisiva introducida por el rector José Félix Patiño.

Posada, al igual que otros profesores de avanzada como Ramón Pérez Mantilla, Tomás Ducay, Fals Borda, secundaron la reforma en abierto enfrentamiento con sectores tradicionales del profesorado. Era, además, la Universidad Nacional el epicentro de un poderoso movimiento estudiantil que producía notables movilizaciones y alentaba vigorosas fórmulas de representación y organización. El carisma intelectual de Posada facilitó su relación con el estudiantado, especialmente con aquel que siendo políticamente avanzado no concordaba con aquellos que le asignaban a la Universidad la función de fungir como la retaguardia del movimiento insurgente.

Posada fue decano de la Gran Facultad de Ciencias Humanas que había resultado de la integración de las antiguas pequeñas facultades napoleónicas anteriores a la Reforma Patiño. En buena hora se ha iniciado esta labor de recuperación de la memoria de Francisco Posada, sin duda uno de los grades intelectuales del siglo XX colombiano.

Conmemoración de Francisco Posada

El evento en el cual se relanzará el libro de Francisco Posada Díaz, 'Movimiento Revolucionario de los Comuneros', editado por Siglo XXI, en 1970, póstumo, ha sido coordinado por María Cristina Posada, su hermana y quien hace más de un año se ha puesto en la tarea de recopilar y rescatar, libros, artículos y variedad de folios y documentos escritos y publicados en diversos medios culturales, obras que Posada escribió en sus cortos 36 años de vida. El próximo 22 de julio, Francisco Posada, cumpliría 80 años.

María Cristina Posada, acompañada por un grupo de intelectuales y académicos de la Universidad Nacional, Jorge Tadeo Lozano y Libre, ha programado durante 2014, con el aporte del profesor Carlos Rincón, numerosos eventos que rescatarán la memoria histórica del país, divulgada por Posada Díaz, para el conocimiento de las nuevas generaciones.

[…]  Francisco Posada Díaz (Bogotá, 1934-1970) fue uno de esos intelectuales que produjo la mejor actitud revisionista y humanística del marxismo europeo de los años cincuentas y sesentas (Garaudy, Merlau-Ponty). Pues siendo muy joven, Posada viajó a Europa, concretamente a Francia y Alemania, para complementar sus estudios de Filosofía, después de haber pasado por la Universidad Nacional de Colombia y de haber estudiado Derecho en la Universidad del Rosario. Pero sin duda el espacio propio de Posada fue la agitada universidad pública de los sesentas, que en parte le presta un carácter, nada esquemático, a sus investigaciones y ensayos: el rigor académico, la carga ideológica y el sentido crítico. Pero ni el rigor ni el compromiso ideológico se convierten, en los trabajos de Posada, en lastres que escamoteen el carácter ensayístico de su propuesta: una lucidez a toda prueba y una voluntad de elaboración prosística, unidas a una indudable afirmación personal (aun en el manejo de los datos objetivos) presiden sus investigaciones históricas, pioneras en la aplicación cuidadosa de los métodos de la sociología militante marxista, en particular sus estudios sobre la historia de Colombia: sobre los chibchas, sobre los Comuneros o sobre todo el movimiento socialagrario en el siglo XX

A su muerte temprana, causada por una leucemia, el joven de 36 años ya había publicado sus trabajos en importantes editoriales de España y Argentina (y póstumamente se publicaría en Siglo XXI de México su ensayo histórico sobre los Comuneros), y en revistas europeas y norteamericanas, y había sido director del Departamento de Filosofía y decano de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia.
(El ensayo 'Ideas sobre la cultura nacional y el arte realista' fue publicado por la revista Letras Nacionales, dirigida por Manuel Zapata Olivella, en el número de enero-febrero de 1965

Bibliografía básica

-Los orígenes del pensamiento marxista en Latinoamérica. Política y cultura en José Carlos Mariátegui. Madrid, Ciencia Nueva, 1968.
-Colombia: violencia y subdesarrollo. Bogotá, Tercer Mundo, 1968
-El camino chibcha a la sociedad de clases y Familia y cultura en las comunidades chibchas. En Ensayos marxistas sobre la sociedad chibcha. Bogotá, Ediciones Los Comuneros, Coautor con Diego Montaña y Sergio Santis.
-Lukács, Brecht y la situación actual del realismo socialista. Buenos Aires, Galerna, 1969.
-El movimiento revolucionario de los Comuneros. México, Siglo XXI, 1971. Póstumo.
Información adicional sobre Francisco Posada y el evento en el portal de la Universidad Nacional:
http://www.humanas.unal.edu.co/filosofia/posada/