Karl Marx ✆ Ludilo Zezanje |
Jorge Luis Acanda
González | En el capítulo anterior [Ñángara Marx: 'El
marxismo en la época de Gramsci'] expliqué
las deformaciones, presentes en el marxismo vulgar, con respecto a la verdadera
esencia del pensamiento de Marx. Ahora pasaré a explicar los elementos
fundamentales de la teoría política marxiana. Como ha ocurrido con otros muchos
aspectos de la obra de Marx, su pensamiento sobre el Estado y la política ha
sido apreciado frecuentemente a través del prisma de las adaptaciones - e
incluso tergiversaciones - hechas por continuadores o adversarios posteriores.
También se ha adolecido de no entender la conexión orgánica entre su
pensamiento político y su crítica económica al modo de producción capitalista.
Muchos
han afirmado que en la obra de Marx no se encuentra una teoría sobre el Estado.
No han comprendido que, más que una teoría positiva, lo que Marx desarrolla es
una crítica al Estado.1 Una teoría crítica del Estado. El elemento
anti-estatista es central en la concepción marxiana. Juan Carlos Portantiero ha
resaltado un momento seminal al afirmar que, en Marx, poder y transición forman
un sólo haz unitario. La conquista del poder por los grupos revolucionarios se
analiza como proceso que tiene como objetivo la eliminación de la enajenación
económica y política. Si bien continuó al pensamiento hegeliano en el rechazo
al jusnaturalismo