Louis Althusser ✆ A.d. |
Louis Althusser |
Si tomo la palabra es por dos razones 1. Una falsa razón y una razón
verdadera. La falsa razón es que siempre es preciso que alguien, en última instancia
cualquiera, comience. Pero está cuestión ya está arreglada de antemano puesto
que soy yo quien ha comenzado. La verdadera razón es que les debo
explicaciones. Sí, sencillamente, les debo explicaciones: para responder a
una cuestión que todos nos hacemos, y que es la cuestión que late en el fondo
de esta reunión: ¿por qué esta reunión? ¿qué es lo que hemos venido a hacer
aquí, entre filósofos franceses, en Junio del 66? ¿qué puede salir y qué va a
salir de esta reunión?
Para darles las explicaciones que les debo, me veo obligado
a decir las cosas sin rodeos, directamente, incluso brutalmente. A la vez muy
deprisa y, un poco también, para hacer tabula rasa de todas las posibles
confusiones, equívocos y segundas intenciones: a todos nos interesa que a las cosas
se las llame por su propio nombre.
Por tanto, ¿por qué esta reunión? He aquí cómo se han ido
sucediendo las cosas. He invitado personalmente a un cierto número de ustedes.
He invitado a filósofos que conozco porque sé que trabajan en el dominio de la
teoría marxista. He invitado, igualmente, a filósofos no marxistas porque sé
que están interesados en los trabajos de los investigadores marxistas.